Julien Sanchez: «El apoyo a Sarkozy dependerá de su actitud»

–El partido de Sarkozy dice del FN que plantea «las buenas preguntas pero aporta malas soluciones»…
–Hace 20 años que lo repiten, pero entonces, ¿por qué nos roban nuestras ideas? Lo vemos estos días, cómo Sarkozy trata de copiarnos propuestas de nuestro programa. Como cuando propone la «presunción de legítima defensa» para los policías… Si damos malas soluciones, ¿por qué las retoman?

–¿Pretende el Frente Nacional ser la «nueva» derecha?
–En todo caso, es la mejor oposición hoy. No nos posicionamos como derecha o izquierda porque para nosotros la UMP de Sarkozy y el Partido Socialista son lo mismo. Están sometidos a la UE, no tienen personalidad, no dirigen un país. Son gobernadores de regiones de Europa. Eso es lo que les reprochamos. Nosotros somos patriotas y soberanistas. Apelamos al voto de los patriotas, de uno u otro signo.

–Tiene 29 años y doce de partido… Una militancia algo precoz. ¿Por qué en la filas frontistas?
–A los 16 años, al constatar la injusticia presente en Francia, como muchos jóvenes. Al ver cómo extranjeros que acaban de llegar tenían más derechos que franceses de varias generaciones. Nuestros padres o abuelos, que han luchado por Francia, deberían tener más derechos. Hay jubilados que cobran pensiones miserables de 500-600 euros habiendo trabajado toda la vida mientras que recién llegados disfrutan de una pensión por vejez de 750 euros sin haber cotizado jamás aquí. Eso es anormal. Los extranjeros no tendrían por qué tener más derechos que los franceses. Por eso defendemos la preferencia nacional para la vivienda, ayudas sociales, empleo... Muchos países lo hacen. Para mí es la verdadera justicia social. Podemos ayudar a los extranjeros en sus países. Pero no se puede ayudar al desarrollo y además acoger la inmigración. Hay que elegir.

–¿Cómo cayó su militancia en el Frente Nacional en una familia más bien de izquierdas?
–Efectivamente, mis padres piensan que todos somos ciudadanos del mismo mundo. Es una visión. Pero luego están las realidades económicas. Aquí, con cinco millones de parados no podemos acoger a inmigrantes que vienen sin trabajo y que van a depender de la sociedad. Prefiero ayudar a los míos antes de ayudar a los otros. Pero hay que priorizar.

–¿El de Marine Le Pen, es un nuevo FN comparado al de su padre? ¿Más moderno?
–Por supuesto. Ella ha presentado las cosas de una manera diferente. Además, es joven, es una mujer. Tiene otra visión. En su campaña habló de economía y temas sociales, llevándolos al primer plano. También es importante su discurso sobre la laicidad para luchar contra la comida «halal» (sacrificio animal por el rito islámico) o los rezos musulmanes en la calle. Precisamente Brigitte Bardot se ha posicionado por Marine porque defiende los animales y crítica la forma en que son sacrificados por el rito musulmán. Los demás políticos no hablan de esto.

–¿Entiende que algunas declaraciones del fundador del partido, Jean-Marie Le Pen, choquen a la opinión pública?
–Si es todo lo que algunos destacan de él en 50 años de vida política, creo que merece algo mejor. Ha sido el único diputado capaz de abandonar en dos ocasiones su escaño para ir a defender en la guerra los intereses de Francia. Eso no quita que haya pronunciado dos frases desafortunadas y que sea lamentable. Pero hay que quedarse con lo positivo. Si nuestro movimiento tiene un peso de casi el 20% en la sociedad, se lo debemos a él.

–¿Regresarán a la Asamblea Nacional con un grupo parlamentario?
-Lo esperamos con todas las fuerzas. En las presidenciales, Marine ha obtenido un resultado (17,9 %) que –de confirmarse– le permitirá pasar a la segunda vuelta de las legislativas en al menos 350 circunscripciones. Es posible que salgamos en cabeza en algunas de ellas, por lo que podremos tener por fin un grupo parlamentario por primera vez desde 1986. Pero el actual sistema mayoritario de doble vuelta es injusto. No es normal que un partido al que votan casi un 20% de los franceses y que debería tener 120 diputados no tenga ninguno. Y todo porque nosotros no hacemos alianzas ni con unos ni con otros. Nosotros cuando ganamos, lo hacemos solos.

–Sarkozy ya ha dicho que no pactarán con el FN. Si hubieran sido favorables, ¿qué posición habría sido la de su partido?
-No vamos a hacer política-ficción. Varios ministros han dicho que, en caso de duelo entre la izquierda y el FN en las legislativas, votarán por la izquierda. Peor para ellos, porque así se están privando de la victoria en las presidenciales. Nuestros electores no quieren que les tomen por tontos.

-¿Dará Marine el 1 de mayo una consigna de voto para la segunda vuelta?
-Ya se verá, pero todo dependerá también de las posiciones que siga adoptando Sarkozy. Lo que está claro es que no se va a pedir que se le vote, tender una mejilla, para que después nos la devuelva prefiriendo en las legislativas a la izquierda que al FN. Creo que son pocos los electores del FN que votarán por él el 6 de mayo. Nuestros votantes prefieren la abstención o el voto en blanco.