El PP reclama a CiU frenar la prohibición

El PP quiere aprovechar su condición de aliado preferente del Gobierno catalán para intentar frenar la abolición de los toros. A la espera de que el Tribunal Constitucional se pronuncie sobre el recurso que presentaron después de que el Parlament aprobara acabar con la Fiesta a partir del 1 de enero de 2012, los populares buscan otras maneras de mantener las corridas de todos en Cataluña. La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, explicó ayer que quiere negociar con CiU una moratoria.
La negociación no va a ser fácil, teniendo en cuenta que la mayor parte de los diputados de CiU se decantaron a favor de la abolición, incluido el presidente de la Generalitat, Artur Mas. Pero el PP apelará al mal estado de las finanzas catalanas, que el ejecutivo autonómico no esconde, para negociar. Sánchez-Camacho consideró que cuando «se piden sacrificios en Sanidad y Educación» no es un buen momento para tener que hacer frente a las indemnizaciones que prevé la abolición de la Fiesta y que los expertos cifran en unos 400 millones de euros.
«El PP trabajará para mantener una tradición histórica», aseguró la presidenta del PP catalán, que para visualizar su apoyo a la Fiesta acudirá el domingo a la última corrida programada en la Monumental, con José Tomás, Serafín Marín y Juan Mora como protagonistas. Los populares también apelarán a la «libertad» y a que la Fiesta es una tradición histórica para negociar con CiU frenar la abolición.