«La financiación público-privada es la única solución a falta de presupuesto»

Alberto Parrondo, presidente de Thales España, compañía puntera de servicios y soluciones tecnológicas que trabaja en sectores como la aviación, el ferroviario o defensa, cree que la colaboración financiera público-privada va a adquirir cada vez más relevancia. –¿Cómo está yendo el año para la compañía?–Tras dos años buenos, está siendo complicado. Y aunque todavía vamos por la mitad, confiamos en cerrarlo de forma muy positiva. Tenemos un catálogo de servicios y negocios muy variado, por lo que unas cosas tienden a compensar otras. No obstante, confiamos en que el atisbo de recuperación se confirme, aunque nuestro principal cliente es el sector público, y éste sí va a acusar dificultades en los presupuestos en los próximos años.–Thales es líder en señalización ferroviaria y, precisamente, Fomento ha anunciado un importante recorte de la inversión. ¿Cómo les está afectando?–De momento, no hemos tenido ninguna cancelación de contrato. Es posible que las próximas adjudicaciones previstas en el Plan de Infraestructuras se retrasen, pero confiamos en que nuestra capacidad de aportar ideas innovadoras para reducir costes y presentar esquemas de financiación que nos ayuden.–¿Confía en que el Plan Extraordinario de Infraestructuras, que combina financiación pública y privada, pueda mitigar un tanto el recorte de la inversión?–Plenamente. Creo que es una gran iniciativa porque nos permite a todos comprometernos más con la estrategia de desarrollar el mercado de la alta velocidad en España. Creo que, en ausencia de presupuesto, es la salida más razonable para todos.–¿Comparte las críticas de los que acusan al Gobierno de equivocarse recortando la inversión productiva?–Lo importante es que en un entorno como el actual seamos capaces de poner en marcha lo más rápidamente las infraestructuras para que rindan un servicio al ciudadano y que lo hagamos de forma competitiva.–¿Qué opciones tiene Thales de optar al vehículo ocho por ocho que quiere Defensa?–Defensa tiene que tomar una decisión una vez que conozca la nueva situación presupuestaria. Mientras tanto, nosotros nos estamos preparando y confiamos en que este contrato, que es uno de los pocos grandes que vislumbramos, esté cuanto antes encima de la mesa de licitación.–¿La cultura de defensa del Gobierno, más inclinado a usar al Ejército como una fuerza de paz y protección civil, dificulta el crecimiento de Thales España?–Si analizamos el presupuesto de inversión, la UME ha sido un gran actor y probablemente lo siga siendo; y las operaciones de mantenimiento de la paz reciben un presupuesto muy significativo. Los soldados necesitan de la tecnología más avanzada para desarrollar una misión muy importante en un entorno muy complicado y, en ese sentido, son un buen cliente. Pero, adicionalmente, los tres ejércitos son clientes que siguen manteniendo un plan de inversiones, ahora algo más recortado debido a la crisis, pero históricamente han tenido inversiones que confío se mantengan.–¿Temen que el recorte que se ha acometido en Defensa como consecuencia de la crisis se convierta en permanente?–Es cierto que en el sector todos tenemos la sensación de que el porcentaje de inversión que realiza en términos de PIB el sector de Defensa es muy bajo en comparación con los países de su entorno y, además, ahora tenemos que hacerlo compatible con la crisis. En el corto plazo, no veo posible un aumento de esa inversión.