Andalucía

El PP presenta su propia iniciativa de reprobación a Duran e IU anuncia otra

Arenas recrimina al PSOE que incluyera en su texto «50 insultos» a los populares

Javier Arenas, ayer, durante la presentación del grupo de trabajo que elaborará las propuestas del programa electoral de la formación en materia de Política Institucional
Javier Arenas, ayer, durante la presentación del grupo de trabajo que elaborará las propuestas del programa electoral de la formación en materia de Política Institucionallarazon

Sevilla- El acercamiento entre socialistas y populares andaluces por reacción a las declaraciones sobre el PER –hoy Aepsa– del candidato de CIU a las elecciones, Josep Antoni Duran i Lleida, ha sido sólo un espejismo.

El PP registró ayer su propia iniciativa para reprobar las declaraciones del político catalán. Cabe recordar que en la presentada el día anterior por el PSOE-A se hacía mención expresa al cuestionamiento de la política del PER por parte de la «derecha política de nuestro país» y, según aseveró ayer el presidente del PP-A, Javier Arenas, encerraba «al menos 50 insultos» hacia los populares.

La Proposición no de Ley del PP-A contiene párrafos similares a la del PSOE en los que se afirma, entre otras cuestiones, que las palabras de Duran «responden a un profundo desconocimiento de la realidad andaluza» o que el PER «ha sido un instrumento de desarrollo de los pueblos» de la comunidad. En ella se propone al Parlamento que rechace «las declaraciones de Antoni Duran i Lleida por ofensivas, denigrantes y falsas», así como que «repruebe su actitud despreciativa hacia la sociedad andaluza».

¿Cuál es la diferencia con la del PSOE? Que se ciñe, en dos folios, a la reprobación del líder de CIU, sin hacer referencia a otros partidos. En ese sentido, Arenas calificó de «curioso» el hecho de que los socialistas pensaran que los populares iban a firmar una iniciativa en cuyo preámbulo «hay 50 insultos al PP». «Querrían que nos insultáramos a nosotros mismos», ironizó. De otro lado, el PSOE difundió a través de la red social Twitter: «El PP andaluz rechaza nuestra reprobación a Duran i Lleida por recoger los insultos que cargos del PP han ido lanzando contra Andalucía».

Los socialistas remitieron durante la tarde una carta al dirigente de CIU para que conozca la realidad del subsidio agrario, acompañada de estadísticas del campo andaluz.

En este contexto, el coordinador de IULV-CA, Diego Valderas, aseguró a LA RAZÓN que su grupo estudia «presentar una tercera iniciativa para intentar que seamos capaces de sacar adelante una, apoyada por los tres grupos». Por su parte, Duran i Lleida, sostuvo, en declaraciones a Telecinco, que si la reprobación prospera en el Parlamento regional se deberá al contexto preelectoral y a las claras «dificultades» que tiene el PSOE en Andalucía. Recibió, además, el respaldo del Gobierno catalán, que indicó, a través de su portavoz, Francesc Homs, que comparte «en su literalidad» sus declaraciones.


Rubalcaba: «El debate de fondo es pertinente»
El candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, consideró ayer «pertinente» que exista, a consecuencia de la crisis y de la necesidad de recortar el gasto público, un «debate de fondo» sobre una posible cultura del subsidio, si bien rechazó los términos en los que lo ha hecho el dirigente de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida. Unas declaraciones que Javier Arenas lamentó, al entender que le dan «la razón» al líder catalán. «Ningún andaluz está en el paro por gusto», defendió, para exigir a Rubalcaba que «rectifique» y al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, que así se lo pida.


«No saldremos de la crisis sin regeneración institucional»
El presidente del PP andaluz, Javier Arenas, defendió ayer, durante la presentación del grupo de trabajo que elaborará las propuestas del programa electoral de la formación en materia de Política Institucional, que «sin regeneración institucional no saldremos de la crisis». En ese sentido, Arenas aseveró que si gana la Presidencia de la Junta, va a modificar el «escandalazo» que, a su juicio, supone el actual reparto de la publicidad institucional que, si gobierna, distribuirá «en función de lectores y audiencias».