Siria

Por la convivencia pacífica por Miguel Ángel ALMODÓVAR

Por la convivencia pacífica , por Miguel Ángel ALMODÓVAR
Por la convivencia pacífica , por Miguel Ángel ALMODÓVARlarazon

Aunque la temporada de la baya infrutescente que conocemos como granada se desliza rumorosa por el otoño y el invierno, siempre es tiempo y momento de regalarse con su zumo o la ensoñación de sus granos, que, en tonalidades de brillante rubí, son una joya de salud y terapéutica. Nuestra dulce granada (porque hay otras variedades que van desde las semidulces a la ácida, muy apreciada por nuestros ancestros y paisanos andalusíes para la fabricación de vinagre y actualmente producto de exportación en Siria, por sus notables propiedades anticolesterolémicas) tiene efectos astringentes y antiinflamatorios de enorme interés en el tracto gastrointestinal (algo que ya sabía el amigo Hipócrates, quien usaba su zumo para combatir problemas digestivos), contiene flavonoides antisépticos y es rica en potasio, lo que la convierte en herramienta de interés para los pacientes de hipertensión y en aliado para los que no queremos renunciar al sabor de la sal y optamos por la convivencia pacífica y el equilibrio sodio-potasio en nuestros organismos.