Barak deja el Laborismo para crear otro partido

Mediante una carta escrita al Knesset (parlamento israelí), la hasta ayer cara visible del Laborismo presentó su dimisión para crear una nueva fuerza política «centrista, sionista y democrática». La decisión de Ehud Barak pilló por sorpresa a sus compañeros de partido y de gabinete pero no a su jefe de gobierno. Fuentes cercanas al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que prefirieron guardar el anonimato aseguraron ayer a la radio hebrea que «Bibi» había sido informado en todo momento de los movimientos de su ministro de Defensa.

El nacimiento de «Independencia», nombre que recibirá el partido a medida de Ehud Barak refuerza el proyecto político del primer ministro israelí y facilita su continuidad. No en vano, Netanyahu no ocultó ayer su satisfacción. «Todo el mundo sabe y los palestinos saben que el Gobierno continuará durante los próximos años, y es este Gobierno con el que tendrán que negociar un acuerdo de paz», trasladó a los periodistas según recogió el diario «Haaretz». Las fuentes gubernamentales citadas anteriormente aseguraron que con esta maniobra se pretende terminar con los rumores difundidos por algunos miembros del propio Partido Laborista que aseguraban que iban a romper la baraja con el Likud si éste no asumía las condiciones previas de la Autoridad Nacional Palestina en las conversaciones de paz.

Ehud Barak se marchó para «seguir su propio camino» como en su día hicieron «Sharon, Ben Gurion y Peres». La sorpresiva medida (no tan extraña en la política israelí) causó ayer la salida de tres de los ocho ministros laboristas de la coalición que prometieron una refundación del mítico partido para tratar de salvarlo de su estado crítico.