Un filántropo millonario tras la máscara de «Batman»

¿Héroe o villano? La imagen de Batman varado en el arcén junto a su lujoso «Lamborghini Gallardo» –lo más similar que encontró al «Batmóvil»- rodeado de agentes de tráfico el pasado 23 de marzo no pasó desapercibida para los responsables de comunicación de la Policía del Condado de Montgomery (en el estado de Maryland, Estados Unidos). Un estrafalario con un deportivo muy lejos de la imagen del benefactor de la imaginaria Gottham City.

Con semejante «captura» la noticia se convirtió en poco tiempo en un nuevo fenómeno viral en las redes sociales. El héroe fue convertido en villano al volante de un coche de lujo con matrículas no autorizadas –portaba el murciélago, icono de Batman, en vez de las placas oficiales, guardadas en el maletero-.

«No se sabe quién es la persona que maneja el vehículo y viste el disfraz», especulaban los medios locales, y con ellos el rumor de las redes sociales, blogs, «YouTube» y medios de comunicación digitales.

El filón de la identidad desconocida del héroe ha durado menos de una semana. Identificado como Lenny B. Robinson, se trata de un millonario que visita desde hace una década a niños enfermos en hospitales del Condado de Montgomery. El alter ego del «Caballero oscuro» anima con su presencia a los pacientes en su lucha contra la enfermedad. «Yo sólo lo hago por los niños, la responsabilidad es estar ahí para ellos, ser fuerte por ellos, y hacerlos sonreír tanto como me sea posible», reveló Robinson en el diario «The Washington Post».

Jeffrey Dome, especialista en el departamento de oncología de un hospital infantil recibió la visita del enemigo del «Joker». «Estas visitas brindan un impulso inmediato para estos niños. Algunos de ellos tienen que permanecer durante semanas o meses aquí, lo que les desgasta a ellos y a sus familias», dijo Dome. «Hay que mantener la moral. Una visita de un superhéroe es como una especie de fantasía en el medio de todo esto», dijo el facultativo.

Las secuelas del legendario héroe
A sus 48 años de edad, el ya bautizado como «Batman de Montgomery» exhibe un uniforme de superhéroe valorado en más de 4.000 euros, aunque igual de generoso ha sido a la hora de recrear su imagen épica, lo es para con los niños enfermos, a los que dona 20.000 euros anuales en regalos de toda índole.

No se trata del único tributo al «hombre-murciélago». En Brasil, el ex militar André Luiz Pinheiro fue contratado a sus 50 años por la Policía de São Paulo como arma –sobre todo propagandística- contra el crimen juvenil. En la localidad eslovena de Dunajska Streda, otro Batman amateur mantiene a raya la seguridad de su vecindario a cambio de comida.