Barcelona

«Que se cumpla la sentencia del Tribunal Constitucional»

Una decena de entidades exige el fin de las multas lingüísticas

El bilngüismo en la escuela fue otra de las banderas de un acto de Impulso Ciudadano que respaldaron PP, UPyD y Ciutadans, entre otros
El bilngüismo en la escuela fue otra de las banderas de un acto de Impulso Ciudadano que respaldaron PP, UPyD y Ciutadans, entre otroslarazon

BARCELONA- «La sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut debe cumplirse». Éste es el sencillo lema que presidió ayer un acto en Las Ramblas con el que los participantes reclamaron a la Generalitat que no caiga en la insumisión, tal y como sugirieron algunos cargos del gobierno catalán tras conocer el fallo del TC. «Se tendrán que hacer políticas de insumisión legal desde las instituciones y desobediencia civil por parte de los ciudadanos», afirmó el conseller de Universidades, Innovación y Empresas, Josep Huguet, después de que el Alto Tribunal diese a conocer su dictamen.

La concentración de ayer, organizada por el movimiento cívico Impulso Ciudadano, fue respaldada por decenas de ciudadanos afectados por la política lingüística de la Generalitat, por partidos políticos (PP, Ciutadans y UPyD) y por entidades (Asociación por la Tolerancia, Ágora Socialista, Convencia Cívica y Acción Cultural Miguel de Cervantes, entre otras).
 
El acto contó con el testimonio de tres afectados por las multas lingüísticas derivadas de no rotular sus comercios en catalán. Feli, dueña de una mercería en el barrio de Nou Barris, denunció que ha sido sancionada con 1.200 euros. Modesta, propietaria de un restaurante en Sants, con 3.200 euros. Y Xurde Rocamundi, empresario del sector inmobiliario en Arenys de Mar, con otros 1.200 euros. Todos ellos confían en que la sentencia del Estatut les libre de sus multas. «Los castellanoparlantes queremos tanto a Cataluña como el presidente de la Generalitat», enfatizó Feli.

También tomó la palabra una madre que lucha desde hace años para escolarizar a sus hijos en castellano. «A la Generalitat lo único que le queda es respetar la sentencia del TC. Porque si los gobiernos no respetan las leyes, ¿qué nos queda a los ciudadanos?», se preguntó.

Al pie del escenario, una gran pancarta reclamaba «bilingüismo en la escuela», una posibilidad todavía lejana debido a la postura de CiU, PSC, ERC e ICV, pero que ahora, con la sentencia del Estatut, está más al alcance de la mano.

Por parte del PP estuvieron presentes su portavoz parlamentaria en Cataluña, Dolors Montserrat, y su líder municipal en Barcelona, Alberto Fernández, además de los diputados Josep Llobet y Eva García. «Los que hacemos las leyes somos los primeros obligados a cumplir las sentencias del TC», subrayó Montserrat.

El líder de Impulso Ciudadano, José Domingo, dijo que es «radicalmente falso que la sentencia se haya hecho en contra de Cataluña porque se ha hecho en favor del Estado de Derecho». Domingo aprovechó su intervención para censurar el conjunto del proceso estatuario, «un desastre», según dijo. «Se ha demonizado a los que han recurrido el Estatut al TC. Se han utilizado todas las artimañas posibles para que la sentencia no fuera dictada como si los impulsores del Estatut contaran con un fonendo que pudiese auscultar el soplo de Cataluña», afirmó.


Seis nuevas leyes que levantan dudas
Después de que la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) asegurara que el catalán no debe ser lengua preferente en Cataluña, algunas leyes han quedado en la cuerda floja. Este es el caso de:
- La Ley de política lingüística, que asegura que el catalán es al lengua vehicular en las aulas.
- La Ley de acogida, que consagra al catalán como lengua de integración.
- La Ley de Educación, que acaba con la tercera hora de castellano.
- La Ley de la lengua catalana de signos.
- La Ley de cine, que fija cuotas de catalán en la exhibición y la distribución de películas en Cataluña.
- La Ley del código de consumo, que establece sanciones a los establecimientos que no rotulan, como mínimo en catalán.