San Sebastián

Blair planta a los batasunos que fichan a Annan como estrella

La expectación se desinfla tras una fugaz rueda de prensa de Lokarri

Lokarri anunció ayer en rueda de Prensa los «fichajes» internacionales
Lokarri anunció ayer en rueda de Prensa los «fichajes» internacionaleslarazon

La gran apuesta de la «Conferencia de paz» que tiene lugar mañana en San Sebastián, el ex primer ministro británico, Tony Blair, dejó ayer plantados a los organizadores y excusó su ausencia alegando «problemas de agenda» por otros «compromisos» en Oriente Medio. En su lugar, Blair enviará a un político de perfil infinitamente más bajo, su ex jefe de Gabinete Jonathan Powell.

Con el ex primer ministro británico fuera de escena, Lokarri ha confiado el peso del tirón mediático internacional al que fuera secretario general de la ONU entre 1997 y 2006, Kofi Annan, y a otra figura mucho más polémica, el presidente del Sinn Fein, Gerry Adams. Este político norirlandés participó activamente en el proceso de paz que llevó en 1998 a la firma de los Acuerdos de Viernes Santo entre católicos republicanos y protestantes unionistas de Irlanda del Norte. Sin embargo, durante años se especuló con la pertenencia de Adams a la banda terrorista del IRA en la década de los 70, una acusación que él siempre negó. El resto de la «comitiva» que servirá de testigo fue anunciada ayer en rueda de prensa en San Sebastián por los organizadores del evento. Además de Annan, Adams y Powell, otra de las personalidades que aportarán sus «reflexiones» a este cónclave es Gro Harlem Bruntland, ex primera ministra de Noruega y miembro de «The Elders», grupo de figuras internacionales por la paz creado por Nelson Mandela.

Bertie Ahern, ex primer ministro de Irlanda, y Pierre Joxe, ex ministro de Interior y de Defensa galo y ex presidente del grupo socialista en la Asamblea Francesa, completan la lista de invitados internacionales. El coordinador de Lokarri, Paul Ríos, y Silvia Casale, miembro del Grupo Internacional de Contacto, fueron los encargados de dar a conocer los nombres de las personalidades que se desplazarán a San Sebastián. Los seis, recalcó Casale, «tienen en común su experiencia, conocimiento e implicación directa en procesos de paz y transformación de conflictos». «Todos ellos pueden enriquecer los esfuerzos que gobiernos, instituciones, partidos políticos y entidades sociales están desarrollando para lograr la normalización política», aseguró.


Familia bajo sospecha
El ex secretario general de la ONU, Kofi Annan, se vio envuelto en un escándalo a causa de su hijo Kojo, fruto de su primer matrimonio. El joven se habría aprovechado de la posición de su padre para la obtención de contratos en el marco del programa de la ONU «Petróleo por Alimentos», que gestionaba el embargo a la venta de crudo de la dictadura iraquí de Sadam Husein.


Lokarri arremete contra LA RAZÓN
El coordinador de «Lokarri» –entidad organizadora de la «Conferencia de paz»–, Paúl Ríos, utilizó ayer Twitter para evidenciar cuál es su concepto de libertad de prensa, del derecho a informar y ser informado, y a la independencia periodística. Nada más desayunarse con la portada de LA RAZÓN, @paulrios tuiteó: «El artículo de La Razón sobre @lokarri es infame, mentiroso y manipulador». Enseguida le preguntamos si insultar a un medio de comunicación era su concepto de la independencia periodística. «Directamente ocultáis parte de la verdad. En nuestra página, en el punto 1, exigimos el fin de la violencia de ETA», respondió con una sinceridad de agradecer. Pasamos de ser «mentirosos» a «sólo» «ocultar parte de la verdad». Aun con rebaja en la pena, tampoco es cierto. Nos fuimos al punto 1 y leemos: «ETA debe realizar una declaración de cese definitivo de la violencia». Pedir a los terroristas una «declaración de» está muy lejos de «exigir el fin de la violencia». Por curiosidad, insistimos en nuestra primera pregunta y, de nuevo, @paulrios por la tangente: «Daros una vuelta por nuestra web, lo que hemos dicho tras cada atentado, y luego opinas». Nos damos la vuelta y vemos que Lokarri «rechaza» los últimos atentados mortales de ETA. No condena. Y esto, para muchos, sí es infame.
P.B.