Sin vivienda y sin ingresos por Sebastián MORA

Cuando se acerca el final de 2010, Año Europeo de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social, debemos admitir cierto fracaso colectivo ante el hecho de no haber logrado cumplir uno de los objetivos de la Agenda Social Europea: la erradicación de la pobreza.

Dentro de la UE hay más de 84 millones de personas bajo el umbral de pobreza. Y en España unos 300.000 hogares carecen de ingreso alguno. Hablamos de personas con rostro y nombre concretos, privadas del derecho a un empleo digno, a mantener un hogar, a construir relaciones de afecto, de protección, de sentido vital y de compromiso con los demás… El impacto de la crisis ha duplicado el número de casos atendidos en los Servicios de Acogida y de Asistencia de Cáritas donde recibimos a personas que manifiestan carencias básicas como alimentación, vivienda o empleo.

Ahora que la crisis revela la fragilidad de un modelo social poco integrador, la pregunta es: ¿Hay lugar para la esperanza? Nuestra experiencia nos indica que sí, pues, incluso en un contexto como el actual, hay hogares que, con nuestro apoyo, han experimentado procesos de integración social positiva. De ahí nuestra confianza en que los itinerarios de intervención social y de acompañamiento que impulsamos desde Cáritas, con la colaboración generosa de más de 59.000 voluntarios, tienen sentido. Incluso en los momentos más difíciles; o quizá deberíamos decir, especialmente en los más difíciles.

Sebastián MORA es Secretario General de CÁRITAS