La presión sobre la venta ilegal aumenta un 16% las multas

BARCELONA- Una de las metas que asumió el alcalde Trias al asumir su cargo fue la de combatir con dureza el incivismo y actuar de forma explícita contra el «top manta» en las calles de la Barcelona, especialmente con la llegada del buen tiempo y el alza de temperaturas veraniegas. Para ello, el Consistorio creó en la Urbana una nueva unidad especializada en la venta ilegal, formada por 40 agentes y coordinada por un mando único, que recibe el apoyo de los antidisturbios –Unidad de Policía Administrativa y de Seguridad (Upas)–.
 Ayer, el intendente portavoz de la Urbana, Carles Reyner, hizo balance sobre la presión al «top manta» y puso de manifiesto que, a mayor asedio, mayor es el número de denuncias interpuestas.
Este verano han crecido un 16,6 por ciento las multas. Entre julio y septiembre se han interpuesto 27.587 denuncias, cuando el año pasado fueron 23.659, y se han incautado 437.127 objetos de una práctica que se concentra sobre todo en el centro de la ciudad, el parque Güell y las calles adyacentes a las playas de la ciudad.
Sobre la participación de los antidisturbios en las operaciones, el intendente Reyner aclaró que su aparición se debió a situaciones de violencia que se dieron a principios del verano, que acabaron con algún agente y algún mantero herido, pero que no se han vuelto a repetir en los últimos meses.