Pedro Alberto Cruz: «El terror nunca podrá vencer a las ideas»

MURCIA- Al cumplirse una semana de la brutal agresión al consejero de Cultura de Murcia, Pedro Alberto Cruz, recibe en su domicilio a LA RAZÓN para hablar de su estado físico y anímico. « Del primero, recuperándome-dice-, del segundo, cada vez más incrédulo». Pese a todo, no renuncia a lo que para él es su vida, su pasión, trabajar por y para la cultura.

– A día de hoy, ¿qué se sabe de las investigaciones policiales?
– No puedo hablar sobre eso porque está bajo secreto de sumario, bastantes filtraciones ha habido al respecto que no han contribuido absolutamente en nada a la operación y que incluso han ido en perjuicio de mi persona. Sobre la actuación de la Policía no voy a hablar porque tengo la constancia de que se está volcando al mil por cien.

–¿Usted considera que se han sustentado los ataques contra su persona en el supuesto parentesco con el presidente Valcárcel?
–Hombre, los insultos que me profieren antes de agredirme fueron claros. Repitieron hasta tres veces «consejero, hijo de puta, sobrinísimo». Con consejero aluden a mi cargo y con sobrinísimo aluden a una especie de adjetivo despectivo que se venía utilizando incansablemente durante los últimos años de una manera totalmente consciente y a sabiendas de que no era tal mi parentesco. Evidentemente contribuye eso y contribuyen otras muchas cosas; lo que está claro, es objetivo, es palpable, casi tangible, es que la atmósfera se había ramificado y hecho muy densa y que el sábado 15 parecía que todo estaba a punto de caramelo para que esto pudiera suceder de un momento a otro.

–Los anarquistas tenían a Bakunin y los nihilistas no tenían a nadie. ¿El vacío puede ser la causa de su agresión?
–Esto es una historia coral que se ha venido escribiendo de manera coral durante mucho tiempo. Siempre he dicho que la corresponsabilidad es muy grande, que hay personas que han ido a hacer daños y otras simplemente que se han sumado a esas otras personas que iban a hacer daño y han repetido frívolamente cosas contra una misma persona contra lo que todo valía. Quizás esta Consejería ha sido el claro ejemplo del relativismo. Todo vale y contra la figura del consejero y la figura del equipo de Gobierno que trabaja junto a él es fácil meterse porque nunca sucede nada y porque hay una especie de consenso implícito en torno a eso. Había una atmósfera, un ambiente pegajoso, un ambiente sucio, un ambiente tangible, un ambiente lleno de mierda, un ambiente que nadie se ha preocupado de limpiar. Las consecuencias de esa atmósfera han sido esto. Pero que nadie espere de mí un discurso del odio, que nadie espere de mi un discurso de la radicalización.

–¿Tiene miedo de que sus agresores anden todavía sueltos?
–Espero y deseo, y estoy absolutamente convencido de que el excelente trabajo de la Policía acabe dando con ellos.

–¿Guarda rencor?
–No, ni siquiera si me echara a mi agresor a la cara le guardaría rencor. No sé hacerlo por mucho que me esfuerce, es que no sé hacerlo.

–Dijo que la venganza será su trabajo. ¿Tanto merece la pena?
–Nunca el terror podrá vencer a las ideas. Por eso vale la pena seguir.

-Se habla de reorganizar el Estado Autonómico y en Cataluña y el País Vasco se habla de suprimir la cultura, ¿qué le parece?
-A mí me parece una barbaridad. Uno de los discursos más feroces y más fascistas de cuantos están aconteciendo hoy en día a consecuencia de la crisis es poner en entredicho la necesidad de la cultura y eso denota que este es un país enfermo.

-¿Consideraría que esto es un paso atrás para tomar impulso?
-Ni siquiera un paso atrás. No necesitamos tomar impulso, vamos tan rápido que no necesitamos tomar impulso.

-¿Cuál es el estado anímico de su equipo?
-Evidentemente está muy afectado por lo que ha sucedido, pero mi equipo es el mejor equipo del mundo.

-¿La buena marcha de la cultura en la Región de Murcia puede verse afectada de algún modo?
-Que va. A esta Región no hay quien la pare. La semilla que hemos puesto culturalmente ha crecido, ha dado sus frutos y hasta ahora ha habido una gran masa silenciosa que la ha apoyado y estoy convencido de que desde este momento esa gran masa silenciosa va a ser una gran masa con voz.

- De todo esto, ¿qué desearía que no hubiera ocurrido?
- Que en primer lugar, la gente no hubiera seguido sacando mezquindad. Yo ciertamente no comprendo cómo cuando a una persona se le agrede brutalmente, todavía se pueden seguir los intereses personales de cada uno y ver qué se puede sacar más de esa persona que está lisiada. Ver como los oportunistas, gente además que no se merecía que se le escuchara, pueda seguir arrojando basura, como mientras que estás así hay algunos que siguen potenciando la mentira que es lo que nos ha llevado hasta hoy. Es que no comprendo cómo eso puede pasar. Yo lo que diría a esos círculos de intereses, que hay alrededor, es que en definitiva aquí hay una persona, y no digo que se preocupen por mí, pero por lo menos que me dejen respirar.