Castilla y León

García Cirac pide debatir con pasión y en defensa de castellanos y leoneses

La nueva presidenta de las Cortes plantea esfuerzo para «reconquistar la confianza de los ciudadanos»

José Manuel Fernández Santiago y Josefa García Cirac charlan tras la toma de posesión y entrega de medallas a los 84 procuradores de las Cortes
José Manuel Fernández Santiago y Josefa García Cirac charlan tras la toma de posesión y entrega de medallas a los 84 procuradores de las Corteslarazon

VALLADOLID- Directo, sobrio, pero contundente. Así fue el discurso con el que arrancó la octava legislatura autonómica en Castilla y León. Un discurso protagonizado por la nueva presidenta de las Cortes, María Josefa García Cirac, en el que el empleo fue un asunto clave, pero también la reivindicación del «noble arte de trabajar en política».

De hecho, la nueva responsable del Legislativo castellano y leonés, procuradora por el PPdne Salamanca, que recibió el respaldo de los 53 procuradores de su partido y contó con los votos en blanco de toda la oposición, invitó a los parlamentarios a «un debate con pasión en la defensa de los intereses de nuestra tierra», siempre que la pasión no desborde el respeto.

Pero también defendió la importancia de «saber escuchar, entender y atender las nuevas demandas de los ciudadanos, ser receptivos a los mensajes y encauzar nuestra actuación al servicio de los castellanos y leoneses, desde la coherencia, la responsabilidad y el compromiso».

García Cirac rompió una lanza por la clase política, cada vez más denostada en España, al manifestar que el objetivo de la Cámara debe ser trabajar «con honradez, con nobleza» y «pensando en los ciudadanos de Castilla y León, auténticos protagonistas de nuestro quehacer diario».

«Vamos a defender los verdaderos valores de la política, de la política con mayúsculas», añadió en su discurso, en el que también apostó por la política «como vocación de servicio, desde la cercanía, la humildad y el esfuerzo».

Además, Josefa García Cirac destacó la importancia del momento político y apeló al compromiso de todos los grupos parlamentarios, al plantear la necesidad de «ser capaces de entendernos, de llegar a grandes acuerdos en todos aquellos asuntos de Comunidad, para seguir impulsando el progreso y la modernización» de Castilla y León.

Toda vez que su principal planteamiento giró en torno a los casi 200.000 desempleados de Castilla y León. Para ellos tuvo sus primeras palabras, cuando señaló que «ellos son el auténtico drama de la crisis».

A todos los afectados por el desempleo quiso enviar un mensaje de optimismo, de confianza en el futuro. «Quiero que sepan que nuestro principal cometido tiene que ser avanzar en la senda de la recuperación económica y de la creación de empleo», concluyó Josefa García Cirac.

Asimismo, la nueva presidenta manifestó que «hemos de demostrar con hechos, y no con palabras, que trabajamos siempre por y para los ciudadanos».

Austeridad
Josefa García Cirac, quien tuvo un recuerdo para sus predecesores en el cargo, apostó por «trabajar para que nuestra Cámara siga siendo el centro de la vida política y de la Comunidad y el lugar para el debate por excelencia». Y planteó para ello hacerlo desde la máxima de la austeridad. «Lo que nos reclaman los ciudadanos y lo que la sociedad necesita es que la austeridad sea uno de los principios que informen la actuación de las administraciones e instituciones públicas».

En este contexto, recordó que las Cortes de Castilla y León son el parlamento más austero de toda España. Y lo seguirán siendo. Al menos éste es el objetivo de Josefa García Cirac, quien manifestó que esa idea de gestión «va a regir nuestra actuación en las Cortes de Castilla y León, de manera especial en la situación actual, pero que entiendo debe exigirse en todo momento».

Al respecto concretó que «incluso en épocas de bonanza económica, quienes tenemos responsabilidades hemos de ser especialmente escrupulosos con el gasto del dinero de todos, buscando la eficacia y la eficiencia en nuestra gestión, que ha de ser transparenete y de fácil acceso».

Por su parte, el presidente saliente, José Manuel Fernández Santiago, aseguró que su ánimo «no podía estar mejor, hay que desdramatizar», y que se «marcha satisfecho por cumplir, desde la modestia, con los objetivos» que se propusieron hace ocho años.

Además, no quiso cerrar ninguna puerta y se mostró dispuesto a aceptar «cualquier oportunidad» que el panorama nacional le va a ofrecer en el futuro, porque «hay cosas que decir en muchos ámbitos».

A mesa puesta
Pero no sólo tomó posesión de su cargo la presidenta del Parlamento. También recogieron su medalla sus cuatro acompañantes políticos en la mesa, quienes tomaron posesión de su asiento. Se trata de Ramiro Ruiz Medrano (vicepresidente primero), Julián Simón de la Torre (vicepresidente segundo), Isabel Alonso (secretaria primera) y Teresa Gutiérrez (secretaria segunda).

Ruiz Medrano coincidió en el mensaje de García Cirac al remarcar su «preocupación por el empleo», a la par que defendió la búsqueda de fórmulas para mejorar la actual situación económica. El ex presidente de la Diputación de Valladolid aseguró que el discurso institucional estuvo «pegado a la realidad» y señaló que la mesa trabajará con «mano tendida a los castellanos y leoneses».

De la misma manera, el socialista Julián Simón de la Torre coincidió en el mensaje lanzado por la nueva presidenta de las Cortes, porque, «queda mucho que hacer», a la par que recordó que «quien ha gobernado la comunidad y las Cortes durante los últimos 24 años ha sido el Partido Popular, por lo que algo de culpa tendrán de esta situación».