Hollande apoya en Kinshasa un despliegue militar internacional para el Congo

Hollande, quien participa en Kinshasa en la asamblea de mandatarios de la Organización Internacional de Francofonía (OIF), afirmó que las fronteras de la RDC son "intocables".

En su intervención, Hollande se mostró a favor de cambiar el mandato de la Misión de Naciones Unidas para la Estabilización del Congo (MONUSCO) con el fin de permitir el despliegue de una fuerza internacional neutral en la frontera de este país con Ruanda.

Las Naciones Unidas mantienen desplegado su mayor contingente sobre el terreno en la RDC, dotado de unos 22.000 efectivos, con el objetivo de proteger a los civiles, al personal humanitario y contribuir al asentamiento de la paz en el país africano.

No obstante, el mandato de las Naciones Unidas prevé la posibilidad de nuevas configuraciones de la MONUSCO "teniendo en cuenta la evolución de la situación, incluida la finalización de las operaciones militares en Kivu del Norte y Kivu del Sur", según figura en la web de la misión internacional.

El Movimiento 23 de Marzo (M23) y otros grupos rebeldes han incrementado su actividad en los últimos meses en estas dos regiones del este del país, con el apoyo de la vecina Ruanda, según las Autoridades de Kinshasa.

La cita de jefes de Estado de la OIF, que se reúne desde ayer y hasta mañana en la capital congoleña, espera aprobar una declaración para poner fin a la guerra que afecta la región oriental de la RDC.

"Esta declaración servirá como hoja de ruta para coordinar a todos los miembros de la OIF. Para nosotros, se trata de poner fin a la guerra", afirmó ayer Isidore Nday Well, comisario general del comité organizador de la cumbre.

La cumbre de los países de habla francesa, que agrupa principalmente los países africanos, además de Francia y Canadá, abordará también la crisis del norte de Mali, en manos de grupos radicales islamistas.

Hollande llamó a la comunidad francófona a actuar con determinación contra el terrorismo en este país de África occidental, en contra del tráfico de drogas y la pena de muerte.

El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó hoy por unanimidad una resolución que pide una intervención militar en Mali para ayudar a las autoridades a recuperar el control del norte del país.

Los quince miembros del máximo órgano de seguridad de la ONU exigieron a los grupos extremistas que cesen las violaciones de derechos humanos, incluidos ataques a la población civil, casos de violencia sexual contra mujeres y reclutamiento de menores.

La resolución, impulsada por Francia, insta al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y a las organizaciones regionales africanas a presentar antes de 45 días un plan que incluya una intervención militar en el norte del país.