Gas Natural confía en sellar la paz con la argelina Sonatrach antes del verano

«Nuestro espíritu es llegar a un acuerdo y tengo que decirles que el nuevo equipo de Sonatrach tiene un talante negociador mucho más racional, y esto nos da esperanzas», dijo el presidente de Gas Natural Fenosa, Salvador Gabarró, antes de la junta de accionistas ordinaria que ayer celebró la compañía. De hecho, en palabras del consejero delegado del grupo barcelonés, Rafael Villaseca, «esperamos pactar antes de que acaben las actuaciones judiciales. A lo largo del primer semestre».

La compañía estatal de hidrocarburos argelina comunicó en 2007 a Gas Natural su intención de revisar al alza, un 30%, el precio de venta del gas pactado en 1995. Ante la falta de acuerdo, el asunto acabó en los tribunales y el pasado verano un tribunal de arbitraje francés dictó el laudo en el que daba la razón a Sonatrach, que podría tener un impacto en las cuentas de 1.400 millones de euros. Gas Natural, sin embargo, impugnó el laudo ante el Tribunal Federal suizo, que, a la sazón, concedió medidas cautelares. Para Gabarró, «en el conflicto nos cayó un laudo injusto y desproporcionado, y ahora, tras la impugnación, el laudo no es efectivo; pero hemos dotado reservas por lo que pueda pasar».

El presidente de la gasista aprovechó la ocasión para anunciar que «está completada la integración entre Gas Natural y Fenosa». Villaseca, además, avanzó que la compañía va a cumplir y mejorar los objetivos de sinergias previstos con la operación de integración y alcanzará en 2012 unas sinergias que se elevan a 750 millones anuales, un año antes de lo previsto. Precisamente ayer Gas Natural, dentro de los compromisos adquiridos con la Comisión Nacional de la Competencia para la compra de Unión Fenosa, acordó la venta de su central ciclo combinado por 313 millones. Como principal novedad en la junta, el presidente de Gas Natural explicó que la compañía propone dar opción al accionista de recibir el dividendo en metálico o en acciones.