Crisis del PSOE

EL PSC rompe la ortodoxia de Ferraz y aviva el debate de las primarias

Las declaraciones de los catalanes sobre Chacón no sientan bien en Madrid

Chacón, ayer, a su llegada a la reunión del partido en Ferraz
Chacón, ayer, a su llegada a la reunión del partido en Ferrazlarazon

MADRID- Mucha conjura, mucha advertencia..., pero el PSOE es tan declarativo y tan ácrata que es difícil mantener el silencio en sus filas. Menos cuando lo que está en juego es el nuevo liderazgo del partido. Ni 48 horas ha tardado el PSC en desmarcarse de la ortodoxia dictada por el Comité Federal del pasado sábado para que nadie hablara de primarias hasta después del 22-M. La prudencia mantenida hasta ahora por los previsibles aspirantes a la sucesión, Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón, se quebró ayer con unas declaraciones del líder de los socialistas catalanes, Joaquim Nadal, para recordar a su compañera de partido y ministra de Defensa que si quiere estar en la carrera de la sucesión debe buscar apoyo entre la militancia y no entre las federaciones del PSOE y sus aparatos. «Votan los militantes, no los aparatos», advirtió el portavoz de los socialistas catalanes a su colega. Las palabras de Nadal vienen a confirmar que, en el caso de que Chacón decidiera dar el paso y presentarse a unas primarias, no todo el PSC estaría con ella, como su entorno trata de sostener desde hace semanas. Nada nuevo, salvo por que Nadal rompe con su declaración la conjura para no hablar de este asunto hasta después de las elecciones municipales y autonómicas, si bien dijo que con sus palabras ni opinaba ni tomaba partido. El que sí tomó partido, y de forma rotunda, fue el ex ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, quien en una entrevista a «El País» se declaraba partidario de Chacón, a pesar de su respeto por Rubalcaba. El caso es que el PSC vuelve a desentonar con el PSOE, donde ayer no sentaron nada bien las manifestaciones públicas de los dirigentes catalanes que quebraban la estrategia y las instrucciones de Zapatero de dedicarse ahora en exclusiva a las elecciones del 22-M. Más allá de ello, en la calle Ferraz sostienen que los movimientos de Chacón «preocupan en el PSC», ya que «lejos de sumar, divide a la militancia». Es más, cada vez hay más convencidos de que la ministra no se presentará a las primarias, y en este sentido añaden a la reflexión de Nadal que el «censo del PSOE es muy distinto al electorado». Dos datos: sólo el 25 por ciento de la militancia son mujeres y sólo el 20 por ciento pertenecen a la misma generación que Chacón. «No lo tiene fácil», añaden.

Todo esto ocurría mientras en la Ejecutiva Federal del PSOE varios dirigentes volvían a poner de manifiesto la necesidad de dedicar ahora todos lo esfuerzos a las elecciones y coincidían en que el PP se ha quedado descolocado tras el anuncio de Zapatero de no optar a un tercer mandato. Lo dijeron en sus intervenciones tanto la portavoz del Comité Electoral, Elena Valenciano («su reacción pone en evidencia la falta de proyecto político»), como la ministra de Sanidad, Leire Pajín, que puso en valor la madurez de la militancia y el eurodiputado Juan Fernando López, que explicó con pelos y señales la teoría del «pato cojo» en EE UU.

Era la primera Ejecutiva tras el anuncio de retirada de Zapatero, y el secretario general del PSOE animó a sus compañeros a «aprovechar la fuerza del contrario en beneficio propio» ahora que el partido de Mariano Rajoy «se ha quedado desorientado». Zapatero sigue convencido de que el PP había concentrado tanta fuerza en criticarle a él, que ahora no sabe qué estrategia seguir, ni contra quién «disparar». Está seguro de que su anuncio ha servido también de «revulsivo» y ha inyectado «dinamismo» en los socialistas. De hecho, se reafirmó en que había adoptado la mejor decisión y en el mejor momento y agradeció que se hubiera respetado su estrategia y sus tiempos, a la vez que puso en valor la reacción «serena» con la que se ha acogido su decisión. Marcelino Iglesias, el secretario de Organización, llegó a hablar de «efecto euforizante».

El presidente del Gobierno que, según varios miembros de la dirección federal, está «más animado que nunca», pidió a los suyos que pongan en valor la fórmula de elecciones de candidatos en el PSOE, esto es, las primarias, frente al dedazo del PP. Y en esta línea siguió Iglesias, ya en la rueda de prensa posterior a la Ejecutiva, en la que dijo que «despejada la mayor», su partido vuelve a estar «en el centro del tablero de juego», en una «muy buena posición» para afrontar las elecciones de mayo. Si en algo coincidieron todos los miembros de la Ejecutiva es en que, desde el sábado, el PSOE podrá reivindicar con mayor legitimidad su cartel electoral.

Durante la reunión, el vicesecretario general, José Blanco, avanzó a sus compañeros la que será la guía de campaña del PSOE y por fin admitió que la suspensión del acto de Vistalegre en el que iba a abrir Zapatero la precampaña tenía que ver con la retirada del presidente.


Patxi López y Jordi Sevilla, reyes del Twitter
Fue tema del día en Twitter. Nada más conocerse el anuncio, la etiqueta #graciaszp fue la más «twitteada» en la red social. Y a eso contribuyeron muchos socialistas, que valoraron la decisión de Zapatero en sus diferentes páginas. Como el ex ministro Jordi Sevilla, uno de los primeros en opinar y en mostrar su disgusto: «Respeto la decisión de ZP, pero no la comparto», publicó en su página. También el lendakari Patxi López fue de los más rápidos en anunciar en su Twitter la noticia que poco después sería de las más comentadas. Él, desde el comité federal socialista, aprovechó que llevaba su teléfono móvil para tomar una instantánea del momento y colgarla en internet con el siguiente mensaje: «Deshojada la margarita llega el momento de trabajar por lo que de verdad importa».