Responsables

Numerosas concentraciones de trabajadores de Spanair y de la empresa Newco, que hacía el trabajo de tierra de la aerolínea, avivan el drama de millones de ciudadanos sin trabajo, con familias que alimentar e hipotecas que pagar. Centenares de empleados llenaron los aeropuertos de Barajas, El Prat y Málaga principalmente, para saber qué será de sus vidas tras el súbito cierre de Spanair. Quieren una solución, que se agilicen los trámites burocráticos y se depuren responsabilidades, pero lo que encuentran es una compañía extranjera frotándose las manos y el despilfarro de dirigentes catalanes, ahora comprobado, de dinero público en una compañía que ha resultado inviable. Los catalanes se quejan de tener que pagar las facturas del nacionalismo, con menos derechos sociales y más impuestos. Porque sí se pudieron gastar 150 millones de euros en este proyecto nacionalista, mientras que para salud o educación pública sólo hay recortes. Además, dicen que a «la Spanair de la Generalitat», conocida así por la importante participación directa e indirecta del Gobierno Catalán, la han hundido las denominadas «low cost» que la propia Generalitat ha financiado y subvencionado. El presidente de Ryanair dice que Spanair venía arrastrando años esta situación y que «no merece vivir en el mercado». ¡Desde luego que es muy difícil competir en tan diferentes condiciones! Pero si se sospechaba que no tenía futuro, ¿por qué no se tomaron medidas antes?