«No se ofenderán con dinero público las creencias de nadie»

MADRID- La alcaldesa de la capital, Ana Botella, aseguró ayer que no se repetirá una polémica como la suscitada por la exposición del Teatro Español en la que aparece la fotografía de un actor con un crucifijo en la entrepierna. «En el futuro me comprometo a que, con dinero público, no se ofendan las creencias de nadie: ni las que son mías ni las de la persona de enfrente, aunque sean distintas de las mías», sentenció.

Asimismo, Botella señaló que la fotografía en cuestión continuará en su sitio en la exposición «Camerinos», de Sergio Parra, porque no está en el Ayuntamiento «para censurar a nadie» y recordó que dicha muestra ya estaba contratada antes de su llegada a la alcaldía. Con todo, a continuación señaló que ella es «la alcaldesa de todos los madrileños, y a mí me gustaría que, en el futuro, con dinero público no se ofendiera a las creencias de nadie», insistió.

Varias asociaciones, como HazteOir.org o Maslibres.org, apoyadas por alrededor de 40.000 firmas, presentaron en el consistorio la petición de retirada de la foto por considerar que «atenta contra los sentimientos religiosos». De hecho, cuando se presentó esta exposición en el Festival de Mérida el pasado verano, las protestas provocaron la retirada de la fotografía en cuestión. En este sentido, el delegado de las Artes, Fernando Villalonga, explicó hace días que Madrid mantendría la imagen «desde un absoluto respeto a la libertad de expresión y creación», si bien consideró que «no se debe ofender a la gente desde los espacios financiados públicamente».

La estampa del actor Asier Etxeandía, tomada antes de salir a escena en una representación de «Inferno» –una versión de Tomaz Pandur sobre «La Divina Comedia» de Dante–, se puede contemplar en una de las salas del Teatro Español de la capital. Para evitar herir sensibilidades, el retrato se encuentra separado del resto de las fotografías por varias mamparas que alertan de que tiene símbolos que podrían ofender algunas creencias religiosas

Llamada a voluntarios para bibliotecas
La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, se mostró muy favorable a la propuesta que realizó esta semana el delegado de las Artes, Fernando Villalonga, sobre dotar de personal las bibliotecas madrileñas con la ayuda de voluntarios entre los vecinos del barrio. «Me gustaría que todos colaboráramos en sacar adelante esta ciudad y en hacer rentables esos centros», afirmó, y recordó que la capital ya cuenta con una red de voluntarios que colabora de forma habitual en muchas iniciativas. «Queremos voluntarios medioambientales y culturales. Que los vecinos se organicen de alguna manera para cuidar esos centros públicos que queremos que sean utilizados por los madrileños», insistió.