«Caso Chaves»: una denuncia que llega cuatro meses tarde

El escándalo ha estallado hace sólo unos días, al trascender que la Junta, siendo aún presidente Manuel Chaves, otorgó una subvención de más de diez millones de euros a la empresa Mina y Aguas Teñidas, de la que es apoderada Paula Chaves Iborra, hija del ahora vicepresidente tercero del Gobierno. No obstante, desde prin-cipios de año viene produciéndose un rosario de insinuaciones por parte del PP en el Parlamento.

El líder del PP-A, Javier Arenas, abrió subrepticiamente la brecha el 21 de enero aprovechando la comparecencia de Chaves sobre la crisis económica. «Aquí parece ser que no hay ayudas para nadie, o, mejor dicho, puede haber ayudas para algunos». Y citó directamente el ejemplo de Aguas Teñidas: «Esto ya lo intuía», deslizó. A partir de ese momento, los populares abordaron el espinoso asunto en tres preguntas orales en el pleno. Y aprovecharon, asimismo, la comparecencia del entonces consejero de Innovación, Francisco Vallejo, el 11 de febrero, sobre la nueva orden de incentivos para volver a lanzar dardos envenenados. «Suponemos que no darán subvenciones a empresas para proyectos ya iniciados. ¿O sí?», preguntó en tono desafiante el parlamentario del PP Salvador Fuentes. «Pensamos también, señor consejero, que no darán diez millones de euros a una empresa que, según su balance, tiene una calificación de riesgo de hasta el 58,4%», añadió.

En el mes de marzo volvió a la carga el diputado del PP José Luis Rodríguez, que puso sobre la mesa una posible irregularidad al recibir la empresa la subvención con el proyecto iniciado. Recordó Rodríguez el 12 de marzo que todos los trámites se habían completado en seis meses e inquirió, dando a entender que sabía mucho más de lo que preguntaba: «¿Ese turbocalendario se ha aplicado a todas las empresas?».

En otra pregunta oral, formulada en el siguiente pleno, volvió a lanzarle al consejero de Innovación: «¿No le parecen muy tibias las exigencias medioambientales del Gobierno? Empezamos a tener la ligera sospecha de que aquí hay gato encerrado, gato encerrado, señor consejero». Vallejo reprochó el «espíritu inquisidor» respecto a Aguas Teñidas. «¿Por qué no aclaran de una vez cuál es su problema con esta empresa, porque ya empieza uno a pensar que hay un ánimo persecutorio contra la misma». Hace un par de semanas, el actual titular de Innovación, Martín Soler, dio cuenta en la Cámara de la subvención tras formular una nueva pregunta José Luis Rodríguez, quien deslizó: «Observamos en la tramitación del expediente algunas cosas muy raras. Parece que aquí hay algo raro». Soler terció: «En su afán de buscar fantasmas, se podrá encontrar algún demonio, y puede que sea, precisamente, de su organización política». Ahora las piezas encajan. La última: el PP, según confirmó la Junta a este diario, accedió al expediente completo de Aguas Teñidas el pasado 12 de mayo.