Investigación científica

Claves para alimentar la salud bucodental

A pesar del calor no debemos abusar de las bebidas azucaradas ya que corremos el riesgo de padecer más caries
A pesar del calor no debemos abusar de las bebidas azucaradas ya que corremos el riesgo de padecer más carieslarazon

La llegada del verano conlleva cambios en nuestros hábitos alimentarios, nuestro estilo de vida, nuestro modo de vestir… en general, durante los meses estivales todos nos relajamos y modificamos ciertas costumbres óptimas para nuestra salud, como por ejemplo acudir al odontólogo o mantener una correcta alimentación, que además de aportarnos todos los nutrientes necesarios para hacer frente al calor, cuide de nuestra salud buco dental. Clínicas Vital Dent nos ofrece una serie de consejos para disfrutar del verano sin descuidar la salud de nuestra boca:

1. Cuidar nuestra boca es el primer paso para tener una buena salud y una sonrisa bonita. Buenos hábitos alimentarios, cepillarse los dientes siempre que tomemos algún alimento, utilizar el hilo dental y acudir regularmente al dentista, son aspectos que no debemos olvidar en ninguna estación del año.

2. Nuestra alimentación es un factor clave en la formación de caries. Los hidratos de carbono, de manera especial, los utilizan las bacterias para atacar nuestro esmalte y formar caries en nuestros dientes.

3. Hay ciertos alimentos que por sus características pasan más tiempo dentro de nuestra boca lo que implica un mayor contacto con los dientes durante un tiempo más prolongado. Esto se traduce en que los ácidos disponen también de más tiempo para dañar nuestro esmalte dental. Esto ocurre por ejemplo con las galletas o con las patatas fritas, con lo que debemos ser escrupulosos con nuestra limpieza después de ingerir este tipo de alimentos. 

4. Todos aquellos alimentos que contienen almidón, como el pan, el arroz, los cereales, las patatas, los bizcochos o los caramelos, pueden producir los ácidos que a posteriori atacarán nuestros dientes. Con lo que es fundamental una correcta limpieza después de ingerirlos.

5. Durante el verano son muy frecuentes los traumatismos dentales debido a que es una época donde los niños practican más deporte al aire libre. En caso de traumatismo total es posible reimplantar el diente si se acude al odontólogo en un cortísimo espacio de tiempo. De la misma manera, si el traumatismo es parcial y podemos recuperar el fragmento roto, el profesional puede reconstruirlo en la clínica.

6. En verano es habitual tomar alimentos y bebidas frías para hacer frente al calor. Sin embargo, este tipo de productos incrementa la sensibilidad dental en aquellas personas que padecen esta molestia relacionada con la retracción de las encías, la caries no tratada a tiempo o malos hábitos en la limpieza buco dental.

7. Otro aspecto a tener en cuenta respecto a los niños es la necesidad de no alterar en exceso sus horas de comida ya que desórdenes alimentarios pueden incrementar en los niños el riesgo de sufrir caries. Esto es debido, entre otras cosas, a que ese desorden implica en multitud de ocasiones la ingesta de alimentos ricos en azúcares en sustitución de otros alimentos más saludables.

8. A pesar del calor, los padres no deben dejar que los niños más pequeños se duerman con el biberón para refrescarse, ya que puede provocar en el niño la denominada caries del biberón que afecta de manera muy negativa a los dientes superiores del niño. El niño debe estar correctamente hidratado a lo largo de todo el día pero sin descuidar su buena salud buco dental.

9. Las personas adultas y a pesar del calor, tampoco deben abusar constantemente de los refrescos que contienen azúcar ya que el riesgo de padecer caries aumenta considerablemente.

10. Asimismo durante el verano comemos en general de forma más desorganizada debido a que realizamos más actividad al aire libre y eso conlleva cambiar de hábitos. Sin embargo, no debemos abusar de los alimentos ricos en azúcar ni de cepillarnos los dientes después de cada comida ya que así evitaremos que los ácidos ataquen nuestro esmalte provocándonos caries.