Ministerio de Justicia

Contra Camps todo vale

La Razón
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Pocos políticos en España pasarían una prueba como a la que ha sido sometido el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps. Durante cuatro meses, cuando todo ha valido en su contra, nadie ha podido sacar una sola vergüenza más de la que, a veces miserablemente, se destapó sobre el presunto regalo de un par de trajes por valor de 2.400 euros, acusación que él ha rechazado. Se le ha negado la presunción de inocencia, se ha vulnerado el secreto sumarial, se le han publicado trozos de escuchas telefónicas callando lo que podía beneficiarle. Y nada. Se le ha abierto en canal y nadie ha podido añadir un solo atisbo de falta. Algunos medios han intentado en este tiempo involucrarlo en delitos de los que el propio juez instructor le ha exonerado. Lamentablemente, lo han conseguido en parte, porque hay quienes creen que Camps está imputado también por financiación ilegal de partidos. Y no es cierto, como tampoco lo es que lo esté en conexión con el delito de corrupción urbanística originado en el Ayuntamiento madrileño de Boadilla del Monte. Camps sólo está imputado por si hubiera cometido cohecho, por recibir el regalo de dos trajes, que él mismo ha negado. En el peor de los casos, habría recibido el regalo. Digo en el peor de los supuestos. ¿Cuántos políticos españoles podrían librarse de los tribunales por eso? ¿Qué es más grave, negar la recepción de unos trajes o negar que se está hablando con ETA o que existe la crisis económica? ¿Por qué tienen castigo unos trajes y no objetos de mucho más valor como relojes, estilográficas, vestidos -hay miembros/as del Gobierno que parecen pasarelas- o cestas de precio superlativo? ¿Por qué aplicarle a él la ley sin concesiones y no a los demás? La verdad es que ha tenido mala pata. El juez ha pillado a un amigo suyo haciendo presuntas maldades y algunos, interesadamente, se las quieren trasladar a él. Pero nadie le puede quitar la imagen de honradez que tiene ante los valencianos. Ayer mismo, la dejaron patente en las urnas de su Comunidad.