Bolsa

Corriente alterna

La Razón
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El Ibex volvió a sufrir ayer otra oleada de ventas en la tercera sesión de la que parece ser su primera semana en rojo desde mayo. El volumen de negocio se disparó en el continuo hasta cerca de 3.000 millones, por desgracia bajistas, con un incremento de las operaciones fuera de negociación. Este aumento de capital fue precisamente lo que dictó el cierre en negativo, ya que la primera tentativa del lunes se produjo con bastante menos dinero. Así, sin apenas volatilidad ni altibajos, el aterrizaje del selectivo por debajo de los 9.300 puntos fue suave, tal y como llevaban pronosticando algunas voces desde hace semanas. Telefónica evitó males mayores para el parqué nacional con su cierre plano, en una jornada en la que Iberdrola cargó con todas las culpas con un recorte superior al 6% tras ampliar capital. La corriente alterna que pronosticó Morgan Stanley ha llegado a la Bolsa.