El 61% de españoles no iría a una playa nudista

Bañarse en cueros en cualquier punto de España es tan libre y legal como hacerlo en bañador, pero no todo el mundo está dispuesto a exhibirse sin tapujos. Más de la mitad de los españoles, el 60,9%, no elegiría ir a una playa nudista, pero lo cierto es que son cada vez más los que abrazan la cultura naturista y buscan incluso destinos turísticos en los que tomar el sol al desnudo. De hecho, son ya uno de cada tres (31,6%) los que manifiestan que estarían dispuestos a bañarse en una de estas playas para robinsones, según revela una encuesta realizada por NC Report para LA RAZÓN. Entre los menores de 45 años hay más desinhibición y el porcentaje aumenta. Entre los jóvenes de 18 a 29 años, casi la mitad, el 45,6% se iría a la playa sin bañador y entre los 30 y 44 años lo haría el 36,7%, mientras que en el segmento de edad entre los 45 y los 64 ya es del 31,2%. Los porcentajes más bajos se registran entre los que tienen más de 64 años, en que sólo estaría dispuesto a ir a una playa nudista el 8,3%, lo que permite constatar que a medida que cumplimos años se nos van quitando las ganas de exhibirnos en cueros.Si hablamos de sexos, las mujeres tienen menos reparos y se muestran más predispuestas a escoger un recoveco naturista para marcharse de vacaciones. Irían el 33,8% de las mujeres, frente al 29,3% de los hombres.En alza En España, se calcula que dos millones de españoles practican el nudismo y cerca de medio millón son asiduos, según la Federación Española de Naturismo. La tendencia está en alza. En los últimos diez años se ha duplicado el número de seguidores. Las costas españolas son especialmente atractivas para los amantes de la cultura del cuerpo libre por su clima y por la legislación, que no pone trabas a esta práctica. Sus seguidores encuentran el paraíso en calas accesibles a pie, muchas veces distantes de las aglomeraciones, casi escondidas y sin apenas servicios.Además, crece la oferta de hoteles, resorts, cruceros y paquetes turísticos que invitan a disfrutar de unas vacaciones al desnudo en México, EE UU, Croacia o Jamaica, entre otros atractivos destinos.España cuenta ya con hoteles naturistas, urbanizaciones, campings con spa y bungalows junto a magníficos campos de golf y que están provistos de piscina, bar y cuentan hasta con servicios gratuitos de autobús a la playa. Está claro que el mundo del naturismo gana adeptos.

Guardar los secretos Marta ROBLESUna de mis mejores amigas tiene a gala llegar a la playa de Es Cavallet, en Ibiza, y quitárselo todo, casi antes de haber elegido hamaca. Dice que así, en pelotas, se siente parte de la naturaleza… Está claro que miramos distinto, porque ella ve esa desnudez pública como algo hermoso y a mí me desagrada profundamente: hasta el más bello de los adonis caminando por la playa con su miembro al viento y el repiquetear de sus testículos como muestra de libertad se me antoja enormemente antiestético… A mí los cuerpos sólo me gustan desnudos en la intimidad, cuando la magia del sentimiento los diferencia de los de las bestias irracionales. Y por más que adoro el sol y el mar, creo que a los humanos nos favorece mucho más la sombra y la pamela. Puestos a elegir, pienso que sólo deberían caminar desnudos aquellos que son perfectos…Sucede sin embargo que no creo que exista la perfección y menos cuando no se saben guardar los «secretos».