Terrorismo

El atentado más fácil

La Razón
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El asesinato de ayer supone un salto cualitativo en la estrategia de ETA. Es la primera vez que los terroristas vascos cometen un atentado en suelo francés contra miembros de las Fuerzas de Seguridad de España. Es verdad que hace unos años actuaron contra un gendarme francés, pero al poco tiempo se disculparon asegurando que se trataba de un error. Pero ayer ETA necesitaba responder, con premura, a la detención de 46 de los 52 procesados en el sumario seguido contra su aparato político y su entorno. Siempre se ha dicho que no se acabará con la banda hasta que desaparezca ese apoyo, por lo que el descabezamiento judicial de su entramado puede ser el principio del fin. ETA lo sabe y para que no cunda el desánimo entre sus fieles ha reaccionado inmediatamente donde nadie esperaba que lo hiciera. Todas las alertas estaban preparadas para un atentado en España, pero no en el país vecino.

Dificultades

Desde el 5 de junio, cuando la organización rompió el alto el fuego, ha intentado matar con insistencia en cualquiera de los atentados que ha cometido. Al final ha ido a lo más fácil, aunque tenga consecuencias graves para ellos desde el punto de vista pragmático. Los etarras y sus familias viven todavía en Francia y actuar allí puede resultar negativo para la «comodidad» de todos ellos. Ésta es la causa por la que hasta ayer la banda nunca había dado este paso cualitativo. Pero la realidad actual es distinta y, de hecho, ha desaparecido el llamado «santuario francés» desde que Francia colabora seriamente en la lucha contra el terrorismo. A partir del cambio estratégico francés, sus autoridades permitieron la presencia en su país de guardias civiles, del servicio de investigación, para que colaboraran con los agentes galos en labores de información. Los mismos que en la tregua advirtieron al Gobierno de que la banda, en Francia, se movía como si estuviera en activo. Los mismos que ahora son objetivo de ETA.