El fútbol-sala como medicina a la apatía

En ocasiones el deporte se puede convertir en la solución a un problema que creíamos ya muy arraigado. Esto es lo que ha pasado en el instituto Montserrat Roig de Elx, donde el fútbol-sala se ha convertido en la solución para la apatía general que presentaban muchos de sus alumnos. Tal y como cuenta José María Caballero, cuando llegó al centro se encontró con problemas de absentismo, bajo nivel curricular, actitud negativa hacia el aprendizaje e integración difícil entre las diferentes etnias que componen el alumnado. Este docente se dio cuenta de que tenía que buscar estrategias que motivaran a estos alumnos, que los hiciera ir felices a su instituto y una vez allí intentar que aprendan con la misma felicidad, aunque los contenidos se salgan del currículo.

Fue entonces cuando se invitó al centro a participar en el torneo de fútbol-11 de Coca-cola. Caballero decidió hacer un equipo y acudir al encuentro en Alicante. El equipo formado con los mejores futbolistas presentaba un mestizaje increíble, la mitad de los integrantes no eran españoles. Además también entrenaba un equipo de chicas del instituto y participaban en la liga escolar femenina enfrentándose a equipos consagrados.

Fue así como entró por los pasillos el gusanillo del fútbol entre las chicas y los chicos, y se programó en Navidad un partidillo entre las chicas del equipo del instituto y un equipo de profesoras y profesores. De este modo, este profesor de matemáticas decidió utilizar el fútbol-sala como punto de encuentro entre todos los alumnos. Decidió organizar un torneo interno en los tiempos de patio, siendo los equipos mixtos. El torneo tomó cuerpo rápidamente y se apuntaron doce equipos mixtos dispuestos a disfrutar en los recreos.

El torneo de fútbol-sala-mixto Montserrat Roig se convirtió en una realidad, con sus once equipos participantes, más de 100 alumnos. Una de las normas que el centro fijó, entre otras muchas, fue que la no asistencia a clase durante dos días consecutivos o cinco alternos supondría la sanción de un partido de suspensión. "Más sudor, menos lágrimas"es el eslogan elegido para dar nombre a este proyecto integrador que el centro pretende, tras tres años de vida, consolidar. Con el paso del tiempo el proyecto ha mejorado tanto que ha salido de las fronteras del instituto, llevando el fútbol-sala mixto por varios institutos de Elx.