El Gobierno descarta la privatización de las cajas

madrid- El reciente relevo en el Ministerio de Economía y Hacienda ha coincidido con la tormenta desatada en torno a las cajas de ahorros y su futuro. Primero se supo que el Ejecutivo, que descarta por principio la privatización de las cajas, tenía ya en su poder algunos de los estudios para preparar el plan de rescate de entidades financieras que el Congreso de los Diputados le ordenó poner en práctica el pasado día 17 de marzo. Como adelantó LA RAZÓN, en su edición del pasado jueves, día 16, «el Gobierno trabaja, en estos momentos, con varias propuestas, además de la realizada por el Banco de España, para cumplir el mandato recibido del Parlamento». La moción aprobada por los grupos se refería a un nuevo fondo de rescate del sistema financiero y no a una reforma de la legislación de las cajas de ahorros, por más que alguna de las propuestas que recibió el Ejecutivo, y en concreto la del Banco de España, sí aconsejaban la modificación de algunos artículos que afectarían al actual sistema de propiedad de estas entidades de ahorro.Existe, no obstante, un proceso abierto, anterior, para una reforma de la LORCA (Ley Orgánica Reguladora de las Cajas de Ahorros) para el que se cuenta con cierto consenso de los populares. Al menos, en lo que se refiere a Caja Madrid, la Comunidad que preside Esperanza Aguirre se ha mostrado receptiva a la idea de reducir el peso de los representantes de partidos políticos en todos los órganos de decisión, que deberían ganar así en profesionalidad, y dejar el ámbito de la política estricta, e incluso de parte de la representación social, sobre la mesa de otros organismos de control.En este mismo sentido apuntan también las recomendaciones elaboradas para el Ejecutivo por la CECA (Confederación Española de Cajas de Ahorros). Su presidente Juan Ramón Quintás, ha alabado recientemente el sistema de representación de las cajas catalanas, que funciona de forma más independiente del poder político. Recuperar el dinero Todo indica que ha sido en el Banco de España, y no en Economía, donde se ha pensado en una reforma de la LORCA para cambiar la estructura de la propiedad de las cajas al margen de la posición del Ejecutivo. Desde el BE se ha defendido ya en anteriores ocasiones la oportunidad de abrir la propiedad de estas entidades aunque ello pudiera suponer su privatización. Por eso ahora, cuando se trata de estudiar sistemas para inyectar dinero público con el que evitar una quiebra o equilibrar las cuentas de una entidad para propiciar su posterior fusión, la autoridad monetaria quiere establecer mecanismos de recuperación de los fondos invertidos. Y su fórmula pasa por cambiar ayudas por activos, pero también por títulos de propiedad. Hoy, como ocurre con CCM, el Banco se enfrenta con la inexistencia de propietarios al estilo de la banca pues, aunque la actual legislación lo permite, sólo una caja ha abierto su propiedad con la venta de obligaciones preferentes.