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El regreso del ídolo adolescente

Efron, de 21 años, presentó ayer en Madrid esta comedia que dirige Burr Steers, un taquillazo en EE UU que resalta los valores familiares.

El regreso del ídolo adolescente
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Mundialmente conocido gracias a su papel protagonista en los filmes de la factoría Disney «High School Musical», Efron regresa a la gran pantalla para regocijo de sus miles de «fans» adolescentes. Lo hace con «17 otra vez», una comedia dirigida por Burr Steers («Cómo perder a un chico en diez días») que se estrena este viernes en nuestro país. Efron da vida junto a Matthew Perry, cada cual en edades dispares, a Mike O¿Donnell, una estrella de instituto que renuncia a un brillante futuro por su novia embarazada. Veinte años después a Mike todo le marcha mal, pero milagrosamente recibe una segunda oportunidad y retorna al cuerpo que ocupaba con 17 años. «Lo más difícil fue hacer el papel de padre», comenta durante la entrevista un desenfadado Efron, con sus zapatillas negras a la última moda sobre el sofá y una limonada en la mano, «pero Steers me ayudó a meterme en la mente de un hombre de 37 años con el que no me identifico en absoluto». Otro de sus desafíos fue demostrar su maestría en el baloncesto, para lo que tuvo un duro entrenamiento de tres semanas. Claro que también hubo momentos de distensión: «Trabajar con Thomas Lennon fue muy divertido. Tiene una gran capacidad de improvisación». Y tanto. En una escena en la que estaba previsto que fuese abofeteado por Lennon una única vez, éste acabó dándole un buen número de mamporros. «¡Y yo no podía cortar, porque el director no lo permite!», se queja. «Fue muy gracioso», le digo. «¡Para ti!», responde entre carcajadas. Su motivación Para Efron, su profesión es una «experiencia educativa»: «Aprendo mucho más como actor que como estrella. Te das cuenta de lo importante que es la familia y lo poco que lo es la fama», reconoce. Y eso que tiene mucha: sus seguidores, mayoritariamente féminas, lo persiguen allá donde va -no en vano en el hall del hotel se agolpaba un nutrido grupo de ellas-, aunque a él no parece molestarle. «Son mi motivación, disfruto con el caos que levantan», asegura. En el futuro, desearía hacer papeles que ahora no están a su alcance, «como de espía. Pero tengo que ir ganando terreno, ahora no es realista», admite. El actor asegura que España «es diferente y asombrosa. Me encanta su arquitectura, su cielo, su comida [degustó un cochinillo]... Me quedo con ella». Y no sólo eso: «También me gustan las españolas, sus rasgos. Me chiflan las morenas y aquí están por todas partes».