Viena

Josef Fritzl está «avergonzado»

Josef Fritzl ocultó hoy de nuevo el rostro y se negó a hablar con la prensa al comienzo de la segunda sesión del juicio por haber encerrado y violado a su hija Elisabeth durante 24 años en un sótano, una actitud que, según su abogado, se debe a que "se ha avergonzado". El conocido como "Carcelero de Amstetten"llegó a la Audiencia Provincial de Sankt Pölten, que acoge el proceso, a las 09.04 (08.04 GMT) escoltado por dos agentes policiales. Al igual que hizo ayer en la apertura del juicio, Fritzl, de 73 años, ocultó el rostro tras un archivador azul y se negó a contestar las preguntas del único equipo de periodistas, de la televisión austríaca ORF, al que se permitió brevemente el acceso a la sala. Rudolf Mayer, el letrado de la defensa, justificó la actitud de su cliente: "Simplemente se ha avergonzado". La sesión de hoy del proceso que juzga a Fritzl por los delitos de asesinato por omisión de socorro, esclavitud y violación, entre otros, se celebrará a puerta cerrada para proteger la intimidad de las víctimas. El jurado popular seguirá visionando hoy el vídeo con el testimonio de Elisabeth durante sus 24 años de encierro y su vida y la de los siete hijos que dio a luz en el sótano. La muerte poco después de nacer de uno de los bebés es la base de la Fiscalía para acusar a Fritzl de asesinato, al entender que ignoró los problemas respiratorios del bebé y no dispuso la atención médica que podría haber salvado al recién nacido. Elisabeth, que no comparecerá en el juicio, es el único testigo de un proceso que se espera quede resuelto el jueves o viernes próximo. También testificarán cuatro peritos, un neonatólogo sobre la posible responsabilidad de Fritzl en el fallecimiento del bebé; un psiquiatra sobre el estado mental del acusado; y dos técnicos sobre el sistema de acceso y ventilación al sótano.

Fritzl recibe apoyo psiquiátrico para prevenir su suicidioJosef Fritzl,está recibiendo apoyo psiquiátrico como medida de apoyo para prevenir su suicidio."Hemos puesto a disposición de Josef F. un psiquiatra que le acompaña desde hace ya semanas antes del juicio", explicó Hubert Günsthofer, un responsable del centro penitenciario en Sankt Pölten, donde está interno el acusado. "Durante el proceso el psiquiatra le acompaña y está a su disposición durante las pausas y al final de la jornada", agregó el responsable penitenciario. "Esta es una medida que se emplea para prevenir el suicidio", explicó Günsthofer. Franz Cutka, portavoz de la Audiencia Provincial de Sankt Pölten, que acoge el proceso, precisó que mañana se escuchará la opinión de la experta que realizó un peritaje psicológico del acusado. Cutka aseguró que durante el juicio Fritzl seguirá en la penitenciaría actual y que será el tribunal el que decida dónde cumplirá la sentencia o si es ingresado en una "institución psiquiátrica". La psiquiatra Adelheid Kastner, autora del informe pericial sobre la personalidad del acusado, deberá responder mañana las preguntas del tribunal sobre la situación mental de Fritzl. En el informe pericial de 170 páginas se indica que, bajo una superficie banal se esconde, en palabras del propio Fritzl, "una vena maligna". El informe recoge el testimonio del acusado, que llega a indicar de sí mismo que "para alguien que nació para la violación", se contuvo "mucho tiempo". Según la autora del peritaje, existe el riesgo de que en el futuro Fritzl "cometa actos con graves consecuencias". Aún así el informe descarta que el llamado "Carcelero de Amstetten"sufra algún tipo de enfermedad mental y estima que en el pasado fue perfectamente consciente de sus actos. El examen psiquiátrico realizado revela una "alteración de las preferencias sexuales", un enorme narcisismo y una "incapacidad emocional"que le impide sentir empatía con el sufrimiento de sus víctimas.

Concederá una entrevista después del juicioFritzl, ofrecerá su versión de los hechos en una entrevista facilitada por una agencia de noticias cuando termine el juicio, cuyo veredicto podría saberse el jueves. La agencia Central European News (CEN), cuyas oficinas estánubicadas en Viena, ha contactado con el abogado de Fritzl, Rudolf Mayer, y se ha ofrecido a encontrar un "comprador"para la entrevista, que tendría lugar en la prisión donde se encuentra el acusado y se publicaría en dos meses. Michael Leidig, el propietario de la CEN y de nacionalidad británica, explicó al diario 'The Guardian' que su agencia se ha ofrecido a actuar como intermediaria en el acuerdo al que llegue el abogado con el medio de comunicación que publicará la entrevista. Este acuerdo podría estar valorado en miles de euros. No obstante, Leidig desmintió las informaciones publicadas acerca de que la entrevista podría haberse vendido por un millón de euros, y añadió que su intención es que el dinero final vaya a parar a la hija de Fritzl, Elisabeth, para ayudarla a construir una nueva vida lejos de la opinión pública. Por ello, el periodista, quien ya cubrió ampliamente el caso de Natascha Kampusch, la joven austríaca que pasó ocho años secuestrada y que consiguió escaparse en 2006, se apresuró a asegurar que ni él ni su agencia recibirán ningún honorario por esta gestión entre el abogado y los medios de comunicación interesados, sino que simplemente ha seguido muy de cerca el caso de la familia Fritzl. "Es una oportunidad para poner fin a esta locura mediática. Hay gente que paga miles de euros por entrevistas con familiares lejanos. Con esto se puede poner dinero a disposición de Elisabeth y darle la oportunidad que nunca ha tenido", explicó Leidig. Aunque confirmó que varios periódicos y otras compañías mediáticas han mostrado "un gran interés"por la entrevista, afirmó que "hay que esperar a que acabe el juicio para ver qué pasa".

El veredicto el jueves Por otro lado, el portavoz de la Audiencia Provincial de Sankt Poelten, Franz Cutka, informó esta tarde de que el jurado podría emitir el veredicto en el juicio contra Fritzl el próximo jueves, día en que también podría conocerse la sentencia. En principio, el jurado, formado por ocho hombres y ocho mujeres, terminará hoy de ver el vídeo con el testimonio de Elisabeth, de aproximadamente 11 horas de duración y en el que la víctima relata su cautiverio y los abusos sufridos por su padre durante 24 años. La segunda sesión del juicio ha estado marcada por esta grabación, en la que también ha hablado uno de los hermanos de Elisabeth. Según Cutka, Fritzl "estuvo mirando el vídeo con gran atención y preocupación".