España

Huesca histórica y milenaria

La Ermita de Salas, siglos de arte en la ciudad oscense
La Ermita de Salas, siglos de arte en la ciudad oscenselarazon

A Huesca hay que venir a relajarse, a disfrutar con la naturaleza, que tiene en el Parque Nacional de Ordesa una de sus manifestaciones más espectaculares. Hay que visitar la nieve y probar las pistas de Astún, Candanchú, Formigal, Cerler o Panticosa. Y podremos conocer castillos de película, como el de Loarre, elegido por Ridley Scott de escenario para su «Reino de los Cielos». Fue levantado en el siglo XI para vigilar la frontera árabe y ha llegado hasta el XXI como la fortaleza románica mejor conservada de Europa.

Pero la capital también tiene sus encantos y un pasado milenario ligado a romanos, visigodos y musulmanes que podremos rastrear recorriendo su casco histórico. A los últimos debemos las murallas que guardan su corazón, delante de las cuales murió el rey cristiano Sancho Ramírez al intentar tomar la ciudad. Era el año 1094.

Un recorrido típico puede comenzar por la plaza de la Catedral. Junto a ella, en estilo gótico y levantado sobre una antigua mezquita, el Ayuntamiento, en el que podemos contemplar el tradicional palacio aragonés renacentista.

Si desde aquí tomamos la calle de Quinto Sertorio llegaremos a la Plaza de la Universidad, una de las primeras en abrir aulas en España. Sus dependencias, junto a las de un antiguo palacio real, albergan el Museo de Huesca, del que destacan las salas consagradas a Goya.

La Iglesia de San Pedro el Viejo (siglo XII) es una de las obras más perfectas del románico aragonés. Llegaremos aquí tomando la calle de las Cortes desde la Plaza de la Catedral. Muy cerca queda la Plaza de López Allué (o del Mercado), uno de los lugares más típicos de Huesca y en cuyos soportales se encuentra la tienda más antigua de España.