Jesulín irá a la Comunión de Andreíta

Iban desojando la margarita: sí, no, sí... Sobre todo, conociendo lo variante que es Belén Esteban y cómo puede sentirse presionado Jesulín de Ubrique entre el ser o no ser. ¿Concurrirá o no a la Primera Comunión que mañana recibirá su hija Andreíta –cómete el pollo– en la parroquia de San Romualdo, en La Elipa, que los finos denominan «la prolongación de O'Donnell»? Es una zona de gente modesta con excepciones, como la «bien pagá» comunicadora que surgió de su relación o fracaso con el torero. El círculo más próximo al matador me confirma su asistencia acompañado por sus dos hijos y propiciada por los impagables consejos de María José Campanario, que busca la paz familiar dejando la guerra, las pataletas y el cabreo televisivo para su antecesora en el trono de Ambiciones. Incluso ha pensado en la felicidad de su cría y en lo que podría dolerle la desbandada paterna. A su hija le va a regalar algo «muy ponible». Lo silenció para no fastidiarle la sorpresa.

Ajeno a la Feria de Jerez

Jesulín estará presente, posiblemente emocionado y echando por tierra las malignas especulaciones de que quiere más a unos hijos que a otros. Incierto, aunque muchas veces pospone su reencuentro por no soportar a la irascible mamá, siempre dispuesta a montar una zapatiesta. Y, por esa obligación ineludible dejará de pasearse por la feria jerezana, estos días en su punto máximo.

Otra de toreros. Será en el fiestón benéfico montado por Paco Arango para la fundación Aladino, del que ayer anticipábamos algo, donde hubo una subasta a fin de aumentar la recaudación total ya abultada con los 150 euros per cápita que abonó cada concurrente y en la que Adriana Abascal fue runrún incesante. Y no sólo por lo poco espectacular de su feo traje Missoni, sino porque es imagen de unos joyeros postineros.

La estilosa mexicana reemplazó la soberanía que Isabel Preysler tenía con los Suárez. Isabel pertenece ya a otra época parece que superada. De igual manera que en tiempos promocionaron perlones o diamantes, mudaron el reclamo publicitario ya manido y ahora se concentran en la ex señora Azcárraga, «El Tigre», personaje emblemático en el periodismo televisivo de México.

«¿Cómo es posible que, con los millones de su marido actual, se haya convertido en atractivo publicitario?», se preguntaban pasmados unos a otros, felices primero con el inesperado fin de fiesta ofrecido por la gran estrella del ballet que es Ángel Corella y entusiasmados por el atractivo de una subasta singular, diferente y atractiva en su variedad.

Lo mismo podían pujar por una raqueta de Rafael Nadal, que batió el récord de subasta, que por celebrar un tentadero con Cayetano, posibilidad que le fue a la zaga, en la finca algecireña de Josele Núñez, que ahora tiene ganadería, heredando toros de los Domeq. Se trata de La Palmosilla. Una de sus hijas trabaja con Rivera Ordóñez en la plaza malagueña, de ahí lo atractivo del tentadero de quien se ha convertido en gran gancho taurino aunque no figure en los carteles isidriles, como tampoco lo están Ponce o José Tomás. Cosas veredes. Cómo está el percal.