Las mujeres se «adueñan» de las togas

MADRID- Las mujeres van tomando, año a año, un mayor protagonismo dentro del mundo judicial, aunque su representatividad en las más altas esferas judiciales todavía es relativamente baja, sobre todo en aquellos destinos donde se exige un determinado número de años de ejercicio. El último informe sobre la estructura demográfica de la Carrera Judicial elaborado por el Consejo General del Poder Judicial este mismo mes, y al que ha tenido acceso LA RAZÓN, pone de manifiesto cómo el 67,29 por ciento de los integrantes de la Judicatura menores de 40 años son mujeres, frente al 32,71 por ciento de hombres. En concreto, en el rango de edad fijado entre los 20 y 40 años hay 1.529 jueces y magistrados en activo, de los que 997 son mujeres y sólo 532 hombres. A partir de ese punto, se invierte la tendencia, aunque en el tramo más inmediato, de 41 a 50 años, la diferencia es más bien escasa: 51,67 por ciento frente al 48,33 por ciento de mayoría de hombres entre miembros de la Carrera Judicial. Los siguientes rangos de edad no hacen sino acrecentar esa diferencia, hasta llegar al último de ellos, el comprendido entre los 61 y 70 años, en que las mujeres sólo representan el 7,21 por ciento. Y es que el acceso de la mujer al mundo de impartir Justicia se ha ido produciendo, sobre todo, desde no hace muchos años, ya que era algo que se venía a considerar «un mundo de hombres». Esas circunstancias se reflejan de forma muy específica y clara en el porcentaje de mujeres existentes en los distintos órganos judiciales. Así, en aquellos que son primeros destinos representan una amplia mayoría, tal y como ocurre en los juzgados de primera instancia e instrucción, donde el 63,66 por ciento de los mismos tienen como titulares a mujeres. En el vértice contrario de la pirámide se sitúa el Tribunal Supremo, cúspide de la Carrera Judicial, que no tuvo entre sus integrantes a una mujer hasta enero del 2002. Fue el anterior CGPJ el que designó a Milagros Calvo como magistrada de la Sala Social. Se convertía en la primera mujer que accedía al más alto escalafón judicial. En total, ahora hay seis magistradas que representan el 8,11 por ciento del total de su plantilla. Entre los motivos que se pueden encontrar para justificar este índice tan bajo se encuentra el hecho de que para acceder a él es necesario contar con, al menos, 15 años de ejercicio profesional. Sin embargo, la tendencia lógica indica que cada vez tendrán más responsabilidades en las altas esferas de la Judicatura. Juzgados de Violencia Cuestión distinta es la relativa a las juzgados de Violencia sobre la Mujer, puestos en marcha hace pocos años. Estos destinos, complejos de por sí, no parecen que sean preferidos por los hombres. Más bien, al contrario. De hecho, en el 66,67 por ciento hay una mujer al frente de esos órganos. Todas estas circunstancias hacen que el porcentaje de mujeres sea mayoritario en juzgados y tribunales de seis comunidades: Madrid, Cataluña, Valencia, País Vasco, Galicia y Canarias. Otro aspecto relevante del informe del CGPJ pone de manifiesto que no es nada frecuente que los jueces soliciten una excedencia voluntaria para cuidar a sus hijos. De hecho, de los más de 4.200 jueces españoles, sólo 24 se han acogido a ese derecho, y sólo uno era hombre.