Sevilla

«Madrid es una plaza exigente pero justa»

Lo dice Sebastián Castella, que hoy se ve las caras con Morante y Talavante 

«Madrid es una plaza exigente pero justa»
«Madrid es una plaza exigente pero justa»larazon

Sebastián Castella hace esta tarde el primero de los tres paseíllos que tiene contratados en Madrid. «Es mi declaración de intenciones anunciarme en tres ocasiones en la plaza más importante del mundo. No quiero pronosticar lo que va a pasar, pero yo tengo en mi cabeza las ideas claras», dice el francés. RelumbrónToreará esta tarde junto a Morante de la Puebla y Talavante en el primer cartel de figuras en lo que va de la Feria de San Isidro. El relumbrón llega a Madrid tras el túnel de las oportunidades y el ciclo de saldo que ha organizado este año Taurodelta. Sebastián Castella conoce bien la Monumental de Las Ventas. El 18 de mayo de 2007 logró descerrajar la codiciada Puerta Grande que otras veces se cerró con el mal uso de los aceros. Mantuvo hace algunas temporadas un idilio con esta plaza y tiene en mente recuperar esa relación que se establece con el público de Madrid: «La gente es exigente pero justa, y eso sólo lo hay en esta plaza. Cuando un tío se juega la vida, le demuestran mucho respeto». Por Sevilla pasó con firmeza a pesar de que no le acompañó la suerte y Madrid será clave para tomar el pulso a su temporada. Abrirá cartel esta tarde uno de los toreros más esperados del ciclo: Morante de la Puebla, que llega fortalecido tras su caminar por la Feria de Abril. Tres tardes cimentadas en el valor y la seriedad ante el toro han dado alas y cobijo a la alargada sombra de su torería. En Sevilla conquistó al depurar el toreo y salir de sus manos valor armado ante toros difíciles, encarados y de embestidas hurañas, que revestía su actuación de otro color. Todo lo que ocurrió entre el albero y los tendidos tenía sabor único. La reconconquistaDos orejas cortó Talavante tras una faena de estilismo y buen corte. Recordó a aquél que abrió la Puerta del Príncipe en la temporada de 2007. Reconquistaba así al público de Sevilla, después de naufragar en su encerrona en Las Ventas del pasado Domingo de Resurrección. Estoqueó seis toros de Cuvillo ante mucho silencio y escaso lucimiento. Mas lo hizo en tiempo récord: una hora y 45 minutos. A las siete horas comienza el auténtico duelo de figuras en Madrid. La primera plaza del mundo.