Italia
Mucho más que pasta
Decir que Boccondivino es uno de los mejores italianos de la capital es descubrir más bien poco. Pero lo que sí es conocer el nuevo espacio de su cocinero y propietario, Ignazio Deias, situado en la puerta colindante. La Pizziccheria poco tiene que ver con su cocina de autor, comparten la materia prima siempre de calidad única, pero lo que aquí ofrece son recetas muy tradicionales del centro sur del país sin sofisticaciones. Sobre todo porque, con la que está cayendo, dice, la gente lo que busca es comer bien por poco dinero. De ahí que el menú medio ronde los 22 euros.El nombre, Pizziccheria, da a entender un lugar informal, ya que la palabra significa «sentarse a picar algo y degustar un plato de pasta o una pizza». Son de masa casi transparente, llegan a la mesa justo en su punto gracias a un horno de leña fabricado con piedra de lava que el chef ha traído desde Italia y, si lo desea, se la pueden hacer para llevar. Además de las clásicas, el chef diferencia en otro apartado las «gourmet», alimentadas, entre otros ingredientes, con queso de oveja, boletus edulis, rabo de buey o culatello, que es el delicioso embutido logrado de la parte posterior delgada del pernil del cerdo curado con sal, pimienta en grano y molida y una pizca de ajo y vino seco, que, incluso, puede degustar como aperitivo para abrir boca, pero cuidado, porque es lo más caro de la carta. La pizza Tartufona, con queso de oveja toscano y trufa negra, es una buena opción, como también lo es seguir los consejos de Roberto para escoger los entrantes, ya que la oferta es amplia. La lasaña de berenjenas con parmesano se lleva la palma, una decisión tomada después de un almuerzo en el que una receta tan trasalpina como los tomates secos macerados en aceite también fueron un bocado de diez, igual que la ensalada Caponata, que es el típico guiso de verduras italiano aliñado con vinagre balsámico. Loren se pone las botasEn cuanto a la pasta, hay lo justo donde escoger, pero no faltan los penne «arrabbiata», con tomate, un pelín picantes y exquisitos, la auténtica lasaña boloñesa, por eso de que los domingos está abierto y los niños tienen su hueco, y los canelones rellenos de burrata y trufa negra servidos bajo cuadros gigantes de Sofía Loren, Pavarotti y Paolo Conte poniéndose las botas. En cuanto a los vinos, sepa que la carta, a pesar de ser escueta, reúne etiquetas de varias regiones del país. Y, si se le antoja alguna distinta, seguro que Deias la guarda en Boccondivino.
dirección: C/ Castelló 83. Madrid. tel.: 91 435 75 33. precio medio: 22 euros. plato estrella: lasaña de berenjenas y cualquiera de las pizzas. días de cierre: ninguno. Prestaciones: se permite fumar.
✕
Accede a tu cuenta para comentar