América

Sevilla

Por qué la Real Armada fracasó cuando tenía el 70% del presupuesto de la Monarquía

Investigadores de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) de Sevilla ha iniciado un estudio para desentrañar por qué fracasó la Real Armada de los siglos XVII y XVIII pese a haber recibido, junto con el ejército, el 70 por ciento del presupuesto de una Monarquía que se encontraba "en su mejor momento"económico. En un comunicado remitido a Efe, la consejería de Innovación de la Junta explica que el estudio será realizado por un equipo de investigadores internacionales, encabezados por el profesor Juan Marchena, de la UPO. Se trata de "desentrañar las razones que llevaron a la Real Hacienda española a la gestión ineficaz del dinero de las Américas en la construcción de la Real Armada con el objetivo de mantener la hegemonía y control sobre las colonias americanas". Dicha mala gestión "trajo consecuencias como la asfixia fiscal de América o la poca capacidad de uso de los navíos construidos". A través de este trabajo, titulado "Apogeo y crisis de la Real Armada 1750-1820", se analizarán desde la construcción naval hasta la vida cotidiana en la Armada española a fines del siglo XVIII, pasando por el análisis de los cuadernos de bitácora, la formación de las tripulaciones, el estado de los apostaderos en América o las técnicas desarrolladas por la marina española hasta la Guerra de Independencia. "Desde 1750, la inversión más importante de la monarquía fue construir una gran armada capaz de competir con la británica y la francesa, para lo que empleó decenas de millones de pesos en un proceso que llevó a la construcción de más de dos centenares de navíos en un tiempo récord, pero también a disponer de arsenales y astilleros altamente tecnificados", apunta el investigador. Junto a la suma destinada al ejército, estos fondos supusieron cerca del 70 por ciento del gasto de una monarquía que se encontraba en su mejor momento de bonanza fiscal, gracias a los ingresos americanos. Sin embargo, la inversión, pese a que permitió a España mantener su posición en América, no le sirvió para garantizar el dominio del mar. El comunicado dice que el enorme coste de los barcos retrajo a los ministros de la Marina de movilizarlos con asiduidad, por lo que permanecieron la mayor parte de su vida amarrados a puerto. La prueba de ello se encuentra en los cuadernos de bitácora estudiados hasta ahora, que recogen dónde estuvo cada barco, cuántos días navegó o quién lo gobernó. De ese análisis se extraen detalles como que hubo muchos barcos que, con 30 años de servicio, llegaron a navegar sólo 200 días y a distancias muy cortas, pero otros fueron sobreexplotados durante la Guerra de Independencia de América y cruzaron muchas veces el Atlántico. En el trabajo, financiado con 368.000 euros por la Junta, participa un equipo de 20 investigadores de las universidades de Murcia, Politécnica de Madrid, Santiago de Compostela, UNED, Texas Tech, Pablo de Olavide, Queen's University de Montreal, y otros centros de investigación de Ecuador, México, Venezuela y Uruguay.