Ferias taurinas
Triunfo rotundo de Castella en el mano a mano con Perera en la plaza de Nimes
Toros de Domingo Hernández, nobles. Sebastián Castella, silencio tras aviso, dos orejas tras dos avisos y dos orejas; Perera, oreja tras aviso, oreja tras aviso y silencio tras aviso. Lleno en los tendidos.
Sebastián Castella resultó triunfador del mano a mano frente a Perera, con el que se cerraba la feria de Nimes. Poco pudo hacer el francés ante el primero pese a lucirse en un quite por chicuelinas. Falló repetidas veces con el descabello. Mejor le fueron las cosas ante los otros dos. El tercero, premiado con la vuelta al ruedo, le permitió torear a gusto en un trasteo que inició con pases cambiados. Después, toreó templado por ambos pitones. Instrumentó al quinto una faena de temple y mano baja que terminó entre los pitones en el epílogo, rubricándolo con un espadazo en todo lo alto. Muy asentado Perera ante su primero, ejecutó naturales con enjundia y le recetó, tras una tanda de manoletinas, una gran estocada. En el cuarto, después de iniciar con unos ajustadísimos cambiados por la espalda, continuó su labor, con tandas en redondo. El sexto, aunque se dejó por el derecho, resultó complicado por el izquierdo. El diestro resultó volteado sin consecuencias y no terminó de estar a gusto.
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