Zapatero anuncia un protocolo de actuación ante nuevas intervenciones

MADRID- La intervención de Caja Castilla-La Mancha llegó ayer al Palacio de San Jerónimo. Dos fueron las preguntas que la oposición había preparado para el presidente del Gobierno en su primera visita al Parlamento, tras el Consejo de Ministros extraordinario del domingo. Tres fueron las ideas que Zapatero trasladó a la opinión pública desde su escaño: los riesgos de nuestro sistema financiero son «limitados y abordables», el Banco de España elabora ya un «protocolo preventivo» de actuación y los depósitos de los ahorradores están garantizados. Las interpelaciones, una de Gaspar Llamazares; otra de Mariano Rajoy. Las dos demandaban mayor transparencia en la información del sistema financiero español y una explicación de la urgencia del Banco de España.El presidente del Gobierno respaldó la intervención del órgano regulador en Caja Castilla-La Mancha (CCM), que consideró «acertada», y explicó que el protocolo preventivo que redacta el Banco de España será un conjunto de «herramientas útiles» que garantizarán los depósitos de los ahorradores, la competencia de las entidades y la asunción de responsabilidades de los directivos de aquellas cajas que se vean rescatadas, por supuesto, también en el caso de Caja Castilla-La Mancha. Más tarde defendió «la fortaleza del sistema financiero» que, a su juicio, es «solvente y sólido» y cuenta con un «buen supervisor», al que el Gobierno apoyará en todas sus actuaciones, para las que pidió también el respaldo del resto de grupos parlamentarios. La llamada provocó un sonoro abucheo en la bancada popular, que no impidió a Zapatero volver a relativizar la importancia de la intervención e insistir en que CCM es sólo un 0,8% del total del sistema financiero. Mariano Rajoy, que asumió deliberadamente un tono responsable y moderado, reprochó al Gobierno que el caso de CCM haya puesto de manifiesto la ausencia de un «diagnóstico real» de la situación. «Ustedes necesitan un plan, y eso es lo que yo le pido», le inquirió, tras coincidir con el presidente en que los depósitos de los ahorradores están garantizados, por lo que «la gente debe estar tranquila». No obstante, precisó que la actuación del Gobierno y del Banco de España le generan «mucha inseguridad». Rajoy incidió en que el proceso es difícil de calificar de «mero trámite», como ha hecho el Gobierno, que no da confianza. «Le pido claridad, transparencia y un procedimiento que nos dé seguridad a todos», concluyó. En su turno de intervención, Llamazares exigió también a Zapatero que replantee su mensaje de la situación.

«No recortaré derechos sociales»El presidente del Gobierno se dio ayer un baño de multitudes en la inauguración del 40 Congreso Confederal de UGT. Arropado por miembros del Gobierno, Zapatero aseguró que la política de su Gobierno ante la crisis no «será jamás el recorte de los derechos sociales». Pidió a sindicatos y organizaciones empresariales que hagan «el máximo esfuerzo» para cerrar acuerdos que permitan compatibilizar el crecimiento de los salarios de los trabajadores con el mantenimiento del empleo, informa R. Carvajal.