Singapur

Argelia lanza la orden de arresto contra el exministro de Energía y Minas por corrupto

Las autoridades argelinas han interpuesto una orden de arresto internacional contra el exministro de Energía y Minas, Chakib Khelil, y otras ocho personas, en relación al escándalo de corrupción que estalló entorno a la empresa estatal de hidrocarburos Sonatrach, informo hoy la prensa nacional.

Según anunció hoy el procurador general del Tribunal de Argel, Belkacem Zeghmati, la orden de detención, que incluye a su esposa y a sus dos hijos, fue emitida hace dos semanas.

El caso, conocido como Sonatrach II, ya que no es el primer escándalo de corrupción que salpica al gigante gasístico argelino, comenzó a ser abordado por la justicia argelina después de que empezara a ser investigado por jueces italianos.

Uno de los principales sospechosos es el argelino Farid Nuredin Bebyaui que al parecer actuó como intermediario entre empresas italianas y responsables del gobierno argelino y de Sonatrach, a través de una sociedad de Hong Kong, Pearls Partners.

Según el procurador, las investigaciones han revelado la existencia de una red internacional y de cuentas en Singapur, Hong Kong, Líbano, Francia, Emiratos Árabes Unidos e Italia.

Citado por el sitio web TSA, Zeghmati aseguró que hasta el momento sólo Francia, Italia y Suiza han mostrado su voluntad de cooperar con la justicia argelina en el caso.

El pasado 24 de febrero, el director general de la compañía argelina de hidrocarburos, Abdelhamid Zerguine, reconoció por primera vez la existencia de "algunos casos de corrupción"en su compañía, que calificó de "individuales".

Según dijo entonces Zerguine, Sonatrach está en buenas manos y solo un número reducido de personas está implicado en asuntos de corrupción.

"Comprendo que puede impactar a la población, pero Sonatrach está en buenas manos y estos hechos son comportamientos individuales", aseguró entonces Zerguine.

Todo comenzó después de que la prensa italiana y canadiense revelaran un supuesto delito de sobornos para obtener contratos en Argelia que implicaba a la empresas Saipem (Italia) y a SNC Lavalin (Canadá)

Khelil, considerado un próximo al presidente del país, Abdelaziz Buteflika, ha sido objeto de duras críticas por parte de la prensa nacional, que también ha cargado las tintas sobre la supuesta imparcialidad de la justicia y su lentitud a la hora de juzgar este caso.