Internacional

Batalla campal por la reforma de la Constitución

En medio de la amenaza terrorista en Turquía, los islamistas presionan al Parlamento para aumentar los poderes de Erdogan

Los diputados turcos debaten a puñetazos y patadas la reforma presidencialista de la Constitución
Los diputados turcos debaten a puñetazos y patadas la reforma presidencialista de la Constituciónlarazon

En medio de la amenaza terrorista en Turquía, los islamistas presionan al Parlamento para aumentar los poderes de Erdogan

Ya es sabido que el debate político no es el método más utilizado por sus señorías en el Parlamento turco. Empujones, patadas e incluso algún mordisco se han visto estos días en el hemiciclo, donde los diputados están discutiendo nuevos cambios en la Constitución para darle poderes excepcionales al presidente Recep Tayyip Erdogan. La tensión política volvió a estallar ayer con duros enfrentamientos físicos entre diputados oficialistas y opositores.

En la trifulca participaron parlamentarios del Partido Justicia y Desarrollo (AKP) y del opositor Partido Republicano del Pueblo (CHP). Según las agencias estatales y medios turcos, los diputados empezaron a discutir y llegaron a las manos en medio de la votación de un artículo que prevé bajar la edad para poder ser elegido diputado desde los 25 años actuales a los 18, lo que obligó interrumpir la sesión parlamentaria.

Desde hace cuatro días, se vive una fuerte tensión en el Parlamento, donde el islamista AKP, en el poder desde el año 2002, ha presentado una propuesta de reforma constitucional con 18 artículos para cambiar el actual sistema parlamentario a uno presidencialista, que le otorgue poder absoluto a Erdogan como jefe de Estado. Durante la sesión de ayer, antes de la pelea épica a puñetazos, patadas y sillazos, los diputados aprobaron el quinto artículo del paquete de reformas, tras la adopción de los primeros cuatro durante el martes y el miércoles. Los 18 artículos de la reforma se debaten uno por uno antes de una votación final para aprobar el paquete entero.

Ya el miércoles se produjo otra pelea con puños y con lanzamiento de vasos y sillas tras la medianoche en la Asamblea Nacional. El choque empezó cuando diputados del principal partido de la oposición, el socialdemócrata CHP, filmaron cómo los legisladores del islamista AKP votaban de forma pública, pese a que la Constitución establece que el voto debe ser secreto. Tanto el CHP como el prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP) denunciaron que los diputados islamistas votan de forma abierta para demostrar su lealtad al «sultán» Erdogan.

La aprobación de la reforma, propuesta por el gubernamental AKP, supondría el mayor cambio político en el país desde la proclamación de la República en 1923 por Mustafá Kemal Ataturk. La reforma prevé que el presidente sea elegido al mismo tiempo que el Parlamento. El jefe del Estado será el encargado de formar Gobierno, para lo que no necesitaría el visto bueno del Legislativo. De esa forma, desaparecería la figura del primer ministro. El jefe del Estado podrá designar a los ministros, altos cargos de la Administración e incluso a la mayoría de los miembros del Tribunal Constitucional y del máximo órgano del Poder Judicial.

El AKP argumenta que este cambio servirá para dar estabilidad al país (que ha tenido 46 gobiernos desde 1950), mientras que la oposición socialdemócrata y la izquierda prokurda advierte de que sólo busca dar aún más poder al actual jefe de Estado.

El partido islamista, fundado y dirigido de facto por Erdogan, cuenta para la reforma con el apoyo del ultranacionalista Partido de Acción Nacionalista (MHP), que espera que con ella se imponga también una política antiterrorista más estricta, que esa formación considera necesaria debido a los constantes atentados kurdos y yihadistas en el país. Esas dos formaciones cuentan con 355 escaños, en principio por encima de los 330 (en una Cámara con 550 asientos) necesarios para convocar un referéndum en el que los votantes deberán aprobar la reforma. Sin embargo, al menos siete diputados del MHP han anunciado que se opondrán a la reforma constitucional.

Con 367 escaños se pueden aprobar enmiendas a la Carta Magna directamente en el Parlamento, pero dada la firme oposición de los otros dos partidos, esta opción parece descartada. La moción se votará dos veces, primero cada punto por separado y luego el total del texto legal. El Gobierno del AKP espera terminar el debate y la votación parlamentaria en seis días y poder celebrar un referéndum popular el 2 de abril, coincidiendo con la fundación de la República.