La Haya
Biden califica de "escandalosas" y "antisemitas" la orden de detención contra Netanyahu
"No hay equivalencia entre Israel y Hamás. Siempre apoyaremos a Israel frente a las amenazas a su seguridad", afirma el presidente de EE UU
A diferencia de la posición de Canadá y algunos países europeos, en Estados Unidos el presidente Joe Biden criticó duramente a la Corte Penal Internacional (CPI), calificando como "indignantes" las órdenes de arresto contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el ministro de Defensa, Yoav Gallant.
Biden reaccionó a las órdenes de arresto contra los líderes israelíes pocas horas después de que la Casa Blanca emitiera un comunicado rechazando el fallo de la corte.
"Independientemente de lo que implique la CPI, no hay equivalencia, ninguna, entre Israel y Hamás", dijo el presidente estadounidense en medio del revuelo internacional que provocó que estos líderes hayan sido pedidos bajo sospecha de crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad. "Siempre estaremos del lado de Israel frente a las amenazas a su seguridad", agregó el mandatario.
Momentos antes de la declaración de Biden, la Casa Blanca había emitido un duro comunicado separado sobre el asunto en el que rechazó categóricamente el fallo de la corte.
"Estados Unidos rechaza fundamentalmente la decisión de la Corte de emitir órdenes de arresto contra altos funcionarios israelíes. Seguimos profundamente preocupados por la rapidez del Fiscal en buscar estas órdenes de arresto y por los preocupantes errores procesales que llevaron a esta decisión", dijo un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, agregando que Estados Unidos está discutiendo los próximos pasos con sus aliados.
La relación de Biden con Netanyahu no ha sido nunca la mejor, y el primer ministro israelí no ha hecho mucho esfuerzo por ocultar que se alegra del regreso de Donald Trump a la Casa Blanca. Sin embargo, para ese momento aún quedan casi dos meses y el clima internacional parece no querer esperarse, con el conflicto entre Rusia y Ucrania acrecentando a niveles nucleares, y ahora este fallo contra el líder israelí.
La noticia ha sido significativa porque por primera vez los líderes de una democracia y de un Estado alineado con Occidente han sido acusados por la corte, siendo considerado por muchos como la decisión más trascendental en los 22 años de historia del tribunal.
Israel no es firmante del Estatuto de Roma y por tanto no es parte del CPI ni reconoce su jurisdicción, pero Palestina está admitida como miembro desde 2015. Por su parte, Estados Unidos tampoco es miembro de la corte.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, no se ha pronunciado por el momento respecto de las órdenes de arresto del CPI, si bien Michael Waltz, designado por Trump como asesor de Seguridad de la Casa Blanca, ha apuntado a "una respuesta contundente al sesgo antisemita del CPI y la ONU en enero", fecha en la que el magnate toma posesión y pasa a ocupar el Despacho Oval.
"El CPI no tiene credibilidad y el Gobierno de EE UU ha refutado estas acusaciones. Israel ha defendido legalmente a su pueblo y sus fronteras de los terroristas genocidas", ha expresado el congresista a través de su perfil en la red social X.
La corte de La Haya, que ha rechazado los recursos presentados por Israel y ha dictaminado que tiene jurisdicción en el caso, cree que hay evidencias de que tanto Netanyahu como Gallant buscaron a sabiendas dejar a la población gazatí sin elementos "indispensables para su supervivencia" y bloquear la entrada de ayuda, obstaculizando además la labor de las organizaciones humanitarias.
Los jueces creen que Netanyahu y Gallant pueden ser "penalmente responsables" por utilizar el hambre como método de guerra, así como de asesinatos, otros actos inhumanos y persecución que entrarían dentro de la categoría de crimen contra la humanidad. Les recrimina, además, que bajo su mando puedan haberse cometido ataques indiscriminados contra la población civil.
La corte ha ordenado también la detención del jefe del ala militar de Hamás, Mohamed Diab al Masri, conocido como 'Abú Deif', después de que otros dirigentes del grupo islamista señalados previamente, Yahya Sinwar e Ismail Haniye, hayan perdido la vida en los últimos meses en operaciones israelíes. Israel le ha dado por muerto, si bien el grupo no lo ha confirmado oficialmente.