Choque de trenes en EE UU por el presupuesto de 2019

La disputa entre demócratas y republicanos amenaza con causar el cierre del Gobierno.

- Fue una de sus grandes promesas electorales y ahora podría costarle a Donald Trump el cierre parcial del Gobierno federal. La construcción del muro en la frontera con México sigue centrando la atención de su presidencia a pocos días para que termine el año, entre el apoyo de su propio partido, que ha impulsado una propuesta de ley para contentarle, y el rechazo de sus contrincantes demócratas, que no tienen intención de favorecer una medida que pueda perjudicar sus políticas a favor de la migración.

Trump daba un ultimátum a los demócratas, exigiendo sus votos en la aprobación de los 5.000 millones de dólares del presupuesto destinado al gasto del muro fronterizo, a pesar de haber asegurado en reuniones previas que no iba a culpar a sus rivales de no salir adelante. Poco duró su palabra. Con 217 votos a favor y 185 en contra, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el jueves la asignación de esos 5.000 millones de dólares, aunque dicha votación debía pasar después a manos del Senado para ratificar el resultado y sacar adelante la propuesta. La minoría demócrata anunciaba entonces que su oposición bloquearía la aprobación y el presidente amenazaba insistentemente con el cierre del Gobierno.

Trump les pasaba así la pelota a los demócratas, anunciando en Twitter que «el cierre estaba en sus manos». Su tono amenazante fue en aumento conforme se acercaba la hora de que la Cámara Alta pronunciara la última palabra. «Los demócratas, cuyos votos necesitamos en el Senado, probablemente votarán contra la seguridad fronteriza y el muro, aunque saben que lo NECESITAMOS DESESPERADAMENTE. Si votan que no, habrá un cierre que durará por un periodo largo de tiempo. ¡La gente no quiere fronteras abiertas y crimen», amenazó el presidente.

Pero sus rivales lo tenían claro: no iban a votar unos presupuestos que incluyeran la construcción del muro. «El presidente está sumiendo al país en el caos», dijo Chuck Schumer, líder de los demócratas en el Senado, asegurando que este cierre inminente del Gobierno es otra de las «rabietas» a las que Trump les tiene acostumbrados. Pero él llama a esta medida «seguridad fronteriza» y asegura que otros mandatarios como Ronald Reagan lo han intentado sin éxito antes.

A pesar de las amenazas, la mayoría de los estadounidenses preferiría que el presidente llegara a un acuerdo con los demócratas sobre el muro para evitar la paralización del Gobierno federal, según una encuesta elaborada por NPR/PBS/Newshour/Marist. Y es que las pérdidas de este cierre podrían traer graves consecuencias para miles de funcionarios del país, que se verían afectados por el recorte de fondos. Aun así, se trata de un cierre parcial, ya que los legisladores ya han financiado cerca del 75% del Gobierno federal hasta septiembre. Gran parte de los posibles afectados trabajan en el Departamento de Seguridad Nacional, Justicia, Interior, Estado, Vivienda y Desarrollo Urbanos. Otro de los impactos previstos por el equipo demócrata del Comité de Apropiaciones del Senado son el despido de casi 400.000 empleados públicos, que incluye el personal de la NASA o el Servicio Nacional de Parques, así como la suspensión de sueldo para otros más de 420.000 funcionarios que se verían obligados a seguir en sus puestos de empleo sin sueldo. El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, programó una votación ayer para debatir el resultado de la votación de la Cámara de Representantes antes de ratificar el resultado.