Encuestas.

El enésimo «plan buitre» contra Maduro

El presidente dice que mostrará pruebas de cómo EE UU desestabiliza Venezuela

El presidente Nicolás Maduro
El presidente Nicolás Madurolarazon

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha acusado a Estados Unidos de urdir un plan para desestabilizar al Gobierno chavista. No es la primera vez que el mandatario bolivariano recurre a la teoría de la conspiración para justificar la grave situación de crisis económica que atraviesa el país caribeño, pero en esta ocasión Maduro ha indicado que posee pruebas que demostrarían que funcionarios norteamericanos se han infiltrado en la Embajada de EE UU en Caracas como parte de un operativo que llamó «plan buitre de sabotaje para la economía de violencia».

El presidente de Fedecámaras, la principal patronal de Venezuela, señaló ayer en declaraciones a LA RAZÓN que estas acusaciones forman parte de la «retórica mediática que el mismo pueblo de Venezuela ya no acepta ni cree. Nosotros partimos del principio de que nadie especula con la abundancia». A pesar de todo, Maduro sostuvo que «el plan buitre se ha lanzado desde la derecha, desde la oligarquía, y lo tengo que decir, desde el imperio estadounidense, desde el Comando Sur», añadió el presidente.

Esta acusación se produce días después de que el Departamento de Estado norteamericano criticara a través de un comunicado la prohibición por parte de las autoridades venezolanas a miembros de la oposición para postularse como candidatos a diputado en las elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre, en las que casi todas las encuestas dan al partido del Gobierno como claro perdedor.

Maduro también arremetió contra la Organización de Estados Americanos (OEA), a la que endosó la responsabilidad de haber acabado «con miles de vidas». Recientemente, Henrique Capriles, gobernador del Estado de Miranda y dos veces candidato presidencial de la oposición, se reunió en Washington con el nuevo secretario general de la OEA, Luis Almagro, para pedirle el envío de una misión de observación para las elecciones legislativas de Venezuela. Sin embargo, la OEA sólo puede enviar una misión cuando lo pide el Gobierno de ese Estado. Y hasta ahora, la única observación electoral que ha aceptado el Ejecutivo de Maduro es la de Unasur.

La ofensiva del jefe de Estado venezolano contra Washington obtuvo este lunes el respaldo del ALBA (la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), una plataforma creada por Fidel Castro y Hugo Chávez que engloba a los países latinoamericanos y caribeños cercanos a la órbita del chavismo. En una reunión extraordinaria celebrada en Caracas, sus miembros se pronunciaron ante las amenazas de «golpes suaves» contra Gobiernos de la región y «sus revoluciones».

La escasez de alimentos está causando estragos en el país. En vídeos grabados por venezolanos y distribuidos en las redes sociales, se ven anaqueles vacíos en las tiendas y largas colas de ciudadanos a la espera de la llegada de mercancías. Hace doce días, un hombre murió durante el saqueo de un supermercado en el Estado de Bolívar en una trifulca mientras los vecinos esperaban el reparto de productos. El índice promedio de desabastecimiento es del 60% y la inflación ronda el 100%, aunque al no proporcionarse cifras oficiales, se considera que los números reales pueden ser incluso superiores.