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España advierte a EE UU de que «se puede romper la confianza»

Margallo consideraría «inaceptable» el espionaje «de confirmarse» su existencia. Exteriores insta a Washington a entregar «toda la información» sobre las escuchas

El embajador de EE UU en España, James Costos, ayer a su la salida del Ministerio de Asuntos Exteriores en Madrid
El embajador de EE UU en España, James Costos, ayer a su la salida del Ministerio de Asuntos Exteriores en Madridlarazon

El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, dijo hoy que España ha transmitido al embajador de EEUU en Madrid, James Costos, su "seria preocupación"por las informaciones relativas al supuesto espionaje que, "de confirmarse", podría suponer "la ruptura del clima de confianza"entre ambos países.

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Magallo, afirmó ayer que el «clima de confianza» entre España y Estados Unidos se rompería si llegara a confirmarse la existencia de escuchas telefónicas realizadas a ciudadanos españoles. «Hemos pedido al embajador, como en dos ocasiones anteriores, que facilitase al Gobierno la información necesaria sobre este asunto que, de confirmarse, podría suponer la ruptura del clima de confianza que tradicionalmente ha presidido las relaciones entre ambos países», fueron sus palabras exactas pronunciadas, informa Efe, desde Varsovia, donde se encuentra de visita oficial para apoyar la internacionalización de las empresas españolas y estrechar lazos con este crucial socio europeo.

Las dos ocasionas a las que se refirió Margallo son, respectivamente, la visita del secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Gonzalo de Benito, a Washington en julio pasado para realizar gestiones diplomáticas en referencia a las escuchas con la subsecretaria de Asuntos Políticos del Departamento de Estado estadounidense y la reunión en agosto del subdirector general de América del Norte, Ernesto de Zulueta, con el Encargado de Negocios de la Embajada de Estados Unidos en Madrid, Luis G. Moreno.

Además, desde Madrid, el Gobierno de España recalcó que, «de confirmarse» las prácticas de espionaje realizadas por la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, en sus siglas en inglés) a ciudadanos españoles, éstas serían «impropias e inaceptables entre socios y paises amigos». De esta manera, se expresó el ministerio de Asuntos Exteriores a través de un comunicado de la Oficina de Información Diplomática después de que el secretario de Estado para la Unión Europea, Íñigo Méndez de Vigo, se reuniera durante 40 minutos en el Palacio de Santa Cruz con James Costos, embajador de Estados Unidos. Méndez de Vigo trasmitió al diplomático estadounidense la preocupación del Gobierno español por las «informaciones aparecidas en los medios de comunicación» y le instó a que su país «facilite toda la información necesaria sobre las supuestas escuchas realizadas en España».

El comunicado de Exteriores posterior al encuentro entre Méndez de Vigo y Costos también hace referencia a las actividades que está realizando el grupo de trabajo «ad hoc» Unión Europea-Estados Unidos sobre protección de datos, ya que, en palabras de Margallo sobre el mismo asunto desde Varsovia, «el consenso europeo es una de las líneas de actuación básicas de la diplomacia española». Asuntos Exteriores confirmó asimismo que el embajador Costos se comprometió durante su encuentro en Madrid con Méndez de Vigo a trasladar a las autoridades de su país la preocupación que existe en el Gobierno español al revelarse que, supuestamente, la NSA espió 60,5 millones de llamadas de teléfono en España entre diciembre de 2012 y principios de enero de este año, según una información publicada ayer por el diario «El Mundo», en la que se hacía referencia a un documento que habría sido filtrado por el ex analista Edward Snowden. El Ministerio de Exteriores aseguró también que el diplomático estadounidense se mostró seguro también de que, en el marco de la colaboración existente «en todos los ámbitos» entre ambos países, el Gobierno de Estados Unidos «despejará las dudas que han surgido sobre este asunto».

Además de su declaración de ayer durante la rueda de prensa conjunta en Varsovia con su homólogo polaco, Radoslaw Sikorski, el jefe de la diplomacia española pondrá encima de la mesa la inquietud del Gobierno por las informaciones que apuntan a actos de espionaje contra ciudadanos españoles en su reunión de hoy con la presidenta de turno del Consejo de la Unión Europea, Dalia Grybauskaite, la jefa de Estado de Lituania. Exteriores quiere de esta manera desmentir las opiniones vertidas en los medios de comunicación sobre el «perfil bajo» que ha tenido la respuesta diplomática española.

La causa de que el embajador de Estados Unidos, James Costos, fuera recibido ayer en el palacio de Santa Cruz, sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, por el secretario de Estado Méndez de Vigo, y no por el titular del departamento, no debe entenderse como una manera de quitarle importancia a las acusaciones de espionaje, ya que, lejos de obviar el asunto, Margallo lleva en su agenda este tema para tratarlo con la líder lituana en Vilna, según afirmaron a este diario fuentes diplomáticas conocedoras del escándalo sobre la vigilancia masiva de Estados Unidos. Además de la reunión con Grybauskaite, Margallo tiene previsto reunirse con su homólogo lituano, Linas Linkevicius, y con el titular de Energía, Jaroslav Neverovic.

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