Unión Europea

España y EEUU reclaman una UE fuerte que hable con voz única en el mundo

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha apostado hoy por una UE fuerte que frene la "deriva"de acuerdos intergubernamentales y hable con una voz única y el embajador de EEUU en España, Alan Solomont, ha afirmado que su país quiere ser socio de Europa "con el Reino Unido dentro".

Ambos han participado hoy en la mesa redonda "Las relaciones UE-EEUU: expectativas ante la nueva administración norteamericana", organizada en la Casa de América, y han coincidido en la necesidad de impulsar la integración europea para luchar contra la crisis y fortalecer los vínculos transatlánticos.

García-Margallo ha lamentado que la UE se está alejando del "método comunitario"-la toma de decisiones entre los veintisiete- para favorecer los acuerdos entre gobiernos, y ha advertido de que esa tendencia dificultará contar con una política exterior común, elemento "extraordinariamente necesario", ha dicho, si se quiere tener un papel relevante en la escena internacional.

En la misma línea, Solomont ha ratificado su apoyo a una Europa "más fuerte y más integrada"porque su país necesita un socio fiable en el mundo y la UE resulta "imprescindible".

"Nosotros queremos ser socios de la UE con el Reino Unido dentro", ha recalcado ante las creciente euroescepticismo británico.

Los dos han apostado además por el inicio de las negociaciones para suscribir un acuerdo de libre comercio entre la UE y Estados Unidos, aunque no han ocultado las dificultades de esas conversaciones.

Solomont ha dejado claro que, antes de llegar a un acuerdo, surgirán "bastantes problemas"de tinte político en áreas clave como la propiedad intelectual o la agricultura, pero ha garantizado que su país está dispuesto a trabajar en ello consciente de que un convenio de ese tipo podría incrementar el PIB europeo en un 2 por ciento.

García-Margallo también ha defendido el acuerdo de libre comercio y ha considerado que resulta "una singularidad"que todavía no cuenten con él países con valores y principios comunes.

El ministro ha apostado por que la política exterior española tenga "anclajes sólidos"en la UE y en Estados Unidos al estimar que esas alianzas facilitarán su papel en un mundo globalizado y en escenarios complicados, como el Norte de África y el Sahel.

"España tiene que saber dónde estamos, qué es lo que queremos y obrar con determinación y coraje", ha recalcado.

A su juicio, conflictos como los de Libia y Mali han confirmado la sensación de que Estados Unidos está orientando su mirada hacia el área del Pacífico, presta menos atención al Norte de África y próximamente, cuando logre autoabastecerse de petróleo, dejará de tener tanto interés en Oriente Próximo.