Debacle electoral

El Partido Socialista de Francia se debate entre la extinción o la refundación

Los socialistas barajan las soluciones para evitar la disolución del partido tras la debacle electoral

La candidata del Partido Socialista, Anne Hidalgo, llegó en décimo lugar con un vergonzoso 1.8% de los votos
La candidata del Partido Socialista, Anne Hidalgo, llegó en décimo lugar con un vergonzoso 1.8% de los votosDPA vía Europa PressDPA vía Europa Press

La resaca del descalabro electoral en primera vuelta sigue dando dolores de cabeza a la izquierda francesa. La candidata del Partido Socialista, Anne Hidalgo, llegó en décimo lugar con un vergonzoso 1.8% de los votos, que supone no solamente un fracaso político abrumador sino una debacle económica. La izquierda no recibirá el reembolso de los costes de campaña que da el Estado francés a los candidatos que obtengan al menos 5% de la votación, lo que pone al partido en riesgo de bancarrota y en peligro de extinción.

Así las cosas, varios de sus militantes llaman a lo que parece ser el último recurso: refundar el Partido Socialista. Uno de ellos es Benoît Arrivé, alcalde de Cherbourg-en-Cotentin, quien no duda en afirmar que «la izquierda se ha desparramado como un rompecabezas. Nuestra familia política ha sufrido un fracaso y no ha sabido unir fuerzas. Ha dejado huérfanos a sus electores». Arrivé publica en sus redes un comunicado, firmado por varios alcaldes de izquierda, donde se propone reforzar la coalición entre socialistas y ecologistas, a la medida de las alianzas que se hicieron para las elecciones municipales de 2020 y que permitió la victoria en ciudades importantes como Lyon, Estrasburgo, Burdeos, Marsella, Montpellier e incluso París, donde la mismísima Anne Hidalgo fue reelecta holgadamente.

Pero otros son más radicales y piensan que el Partido Socialista debe desaparecer: su ex-secretario general, Jean-Cristophe Cambadélis, afirma que el PS debe «autodisolverse», cambiar toda su estructura y anunciar una refundación que comience en septiembre. Esto necesitaría, añade el ex dirigente, que el actual secretario, Olivier Faure, anuncie dignamente su dimisión. Por su parte, Ségolène Royal, ex candidata del Partido Socialista en las presidenciales de 2007, piensa que aunque el PS está moribundo, la izquierda sigue muy viva.

«Si se suman los votos de la izquierda en primera vuelta, se alcanza más del 30%. Sólo que la izquierda ya no es el Partido Socialista por lo que tendremos que reconstruirlo», dice Ségolène Royal, haciendo referencia al 22% obtenido por Jean-Luc Mélénchon, candidato de extrema izquierda; Yannick Jadot de Los Verdes con un 4,6%; Fabien Roussel del Partido Comunista Francés con un 2,3% y Anne Hidalgo con el peor score de todos: 1.8%. Ante estas cifras, la pregunta que cabría hacerse es si el PS estaría dirigiéndose a un nuevo error político, pensando en hacer alianzas únicamente con el partido ecologista, que terminó en sexta posición del primer tour con menos del 5% de los votos. ¿Se ha planteado quizás aliarse al partido La France Insoumise, de extrema izquierda con Mélenchon a la cabeza, y sumar una masa electoral de 22% que no es nada despreciable? Al menos públicamente no se han visto avances en ese sentido.

Pero además de formar alianzas, es preciso revisar la historia. El alcalde socialista de la ciudad de Nancy, Mathieu Klein, quien dice sin tapujos que al PS «ya se le acabó su tiempo», propone hacer un examen de conciencia en donde el primer punto a revisar es el gobierno de François Hollande. «Hubo cosas positivas pero también tuvimos la Ley del Trabajo, que no se hizo con inteligencia. Todavía pagamos por todo eso hoy», dice Klein. El mal sabor que dejó la reforma laboral, que los sindicatos y organizaciones estudiantiles denunciaron como un retroceso en las condiciones y los logros sociales, pesó rotundamente en la candidatura de Benoît Hamon en 2017 y terminó de aplastar al PS el pasado domingo.

Por lo pronto, el partido se reúne el próximo martes 19 de abril para celebrar su consejo nacional – que congrega aproximadamente a 300 personas- con el objetivo de hacer un balance de su actuación en las elecciones presidenciales. Sus dirigentes aseguran que no se trata de un ajuste de cuentas sino de una auto-evaluación para aprender la lección y reorganizarse con miras a las elecciones legislativas de 2026. Con este objetivo, el buró nacional del Partido Socialista se prepara para instalar un comité de campaña política estratégica, para definir las acciones en el terreno. Hidalgo, que encarnó el estrepitoso fracaso del partido estará en el comité.