Política

Beirut

Hezbolá llama a la «calma» tras el atentado contra la Embajada de Irán en Beirut

El partido-milicia chií Hezbolá ha llamado a la "calma"tras el atentado sufrido el martes por la Embajada de Irán en Beirut y ha alertado del riesgo de que se extiendan los "venenos sectarios"que amenazan la estabilidad del país y de toda la región.

Un portavoz de Hezbolá, Naim Qassem, ha subrayado que "la solución

a la confrontación"comienza sobre una base "política"y, a partir de ahí, corresponde a las autoridades libanesas adoptar medidas militares y de seguridad para "intentar calmar"la situación y "reducir"el contagio de los "venenos sectarios".

El doble atentado del martes, en el que murieron al menos 23 personas, fue reivindicado por las Brigadas Abdulá Azzam, una filial de la organización terrorista Al Qaeda --predominadamente suní-- con base en Líbano.

Qassem, el máximo representante de Hezbolá que se ha pronunciado sobre este ataque, ha aclarado, no obstante, que Líbano "no ha llegado todavía al punto en que se encuentra Irak". En este sentido, ha descartado en declaraciones a una emisora libanesa que pueda producirse un brote de violencia que incluya más atentados suicidas.

El papel de Hezbolá en la guerra de Siria, donde ha combatido en las filas del régimen de Bashar al Assad, ha contribuido a inflamar las tensiones entre chiíes y suníes en Líbano. Gran parte de los suníes libaneses respaldan a los rebeldes sirios.

Arabia Saudí, potencia suní en la región y enemigo declarado tanto de Irán como de Hezbolá, ha condenado el atentado de Beirut, registrado precisamente en un barrio del sur de la capital libanesa considerado bastión del partido-milicia.