Política

Sucesos

Implicado un empresario español en el derrumbe de Bangladesh

El catalán David Mayor es uno de los propietarios de las empresas que albergaba el inmueble

Familiares de los trabajadores del Rana Plaza muestran imágenes de sus parientes desaparecidos tras el derrumbamiento del inmueble en Dacca, Bangladesh
Familiares de los trabajadores del Rana Plaza muestran imágenes de sus parientes desaparecidos tras el derrumbamiento del inmueble en Dacca, Bangladeshlarazon

La tragedia del derrumbe del edificio en Dacca, Bangladesh, mira ahora hacia Occidente. Después de descubrir que varias de las empresas textiles que albergaba el inmueble trabajaban para marcas occidentales como la irlandesa Primark o la holandesa C&A, ayer la Policía bangladesí comenzó la búsqueda de David Mayor, un empresario catalán propietario de una de las cinco fábricas que se encontraban en el inmueble. El empresario, según la agencia local UNB, se encuentra en paradero desconocido. Mayor es el director gerente de Phantom Tac junto a su socio bangladesí Aminul Islam, que ya está detenido. Phantom Tac, con sede en Reus, Tarragona, es una empresa mixta que une a Bangladesh Phantom Apparels y a Textile Audit S.L., esta última con sede en Barcelona. El propio David Mayor declaraba al diario bangladesí «Daily Star», en 2007, que «quería mejorar las condiciones de los trabajadores», y explicaba que: «Cuando la gente ve que el precio de venta aumenta 10 céntimos, no importa. Nosotros tendríamos que cobrar 10 céntimos más por cada pieza para mejorar las condiciones, pero cuando eres fabricante, eso se convierte en mucho». En 2009 explicó a la agencia France Press que tenía un centro de educación para mujeres en el país. Pero ayer, nadie cogía el teléfono y su perfil en la red social «Linkedin» había desaparecido. Mientras, la Policía detuvo ayer a Mohammed Sohel Rana, el propietario del derrumbado Rana Plaza. Con él, ya son seis los detenidos y ahora la Policía centra la búsqueda en dos individuos, uno de ellos, el empresario español. Junto a Rana, han sido arrestados tres de los cinco dueños de las fábricas del edificio y dos ingenieros de la Junta Municipal de Savar, por su presunta implicación en la tragedia. Los responsables de las fábricas podrían ser condenados a cadena perpetua, según el abogado Khan Mukul, experto en derecho penal. Al cierre de esta edición, había 371 fallecidos y un total de 2.425 personas han sido evacuadas, y según los equipos de rescate, tienen localizadas a nueve personas con vida que están atrapadas entre los escombros y a las que se les está haciendo llegar agua y alimentos. Desde que el edificio se derrumbase el pasado miércoles, poco a poco han salido a la luz las irregularidades que rodeaban al inmueble. El Rana Plaza fue edificado de forma ilegal y entre otros, la Policía ordenó el día antes de la tragedia el cierre del inmueble al encontrarse una grieta en la estructura. Según los familiares de los trabajadores, éstos «fueron obligados a entrar». La tragedia ha causado un gran revuelo en el país y ha devuelto a la actualidad el problema de las irregularidades en las industrias textiles.