Irán
El Gobierno y los rebeldes llegan a un nuevo acuerdo para evacuar Alepo
La evacuación de los 50.000 civiles y 1.500 combatientes que quedan en la parte este comenzará alrededor de las 6.00 (hora local).
El Gobierno y los rebeldes sirios han llegado a un nuevo acuerdo para evacuar la zona este de Alepo, territorio que hasta ahora controlaban los insurgentes, después del fracaso del pacto con el que este miércoles debían haber vaciado la parte oriental de la ciudad
El Gobierno y los rebeldes sirios han llegado a un nuevo acuerdo para evacuar la zona este de Alepo, territorio que hasta ahora controlaban los insurgentes, después del fracaso del pacto con el que este miércoles debían haber vaciado la parte oriental de la ciudad.
"Se ha alcanzado un nuevo acuerdo que comenzará a implementarse en las próximas horas", ha dicho a Reuters Abdul Salam Abdul Razak, portavoz militar de Nour al Din al Zinki, uno de los grupos armados de la zona rebelde de Alepo.
Fuentes de Jaha Shamiya, otra milicia opositora de Alepo, ha detallado que la evacuación de los 50.000 civiles y 1.500 combatientes que quedan en la parte este --según datos de la ONU-- comenzará alrededor de las 6.00 (hora local).
Una fuente del Gobierno ha confirmado el acuerdo sobre Alepo y ha indicado que, a cambio, se evacuará también a los 15.000 civiles que hay en las localidades de Foua y Kefraya, en Idleb, asediadas por los rebeldes. La oposición siria ha confirmado este extremo.
Las partes acordaron el martes, bajo los auspicios de Rusia y Turquía, una tregua para facilitar la salida de combatientes y civiles de la zona este de Alepo, pero no llegó a implementarse debido a la continuidad de los ataques aéreos y los enfrentamientos sobre el terreno.
Negociaciones previas
En declaraciones telefónicas a Efe, el cabecilla insurgente explicó que “los iraníes están pidiendo ahora la salida de las personas sitiadas en los pueblos de Fua y Kefraya, a cambio de la evacuación de los revolucionarios de Alepo”.
“Nosotros no aceptaremos eso hasta que salga el último combatiente de Alepo”, apuntó Berri, que no obstante insistió en que las negociaciones prosiguen.
Fua y Kefraya son dos pueblos de mayoría chií de la provincia de Idleb, que están rodeados por el Frente de la Conquista del Levante (exfilial siria de Al Qaeda) y otras facciones armadas.
Por su parte, el dirigente del Movimiento Nuredín al Zinki, Yaser Yusef, confirmó en un comunicado que las conversaciones continúan y que “los iraníes están tratando de obtener las máximas ganancias con este acuerdo”, y han introducido varios asuntos como el tema de Fua y Kefraya, así como el de los prisioneros iraníes en manos rebeldes.
Rusia anunció ayer martes que el ejército sirio había detenido sus operaciones en Alepo y que se había alcanzado un pacto para la salida de los insurgentes.
El Centro Ruso para la Reconciliación en Siria ha denunciado que los milicianos rebeldes han incumplido este miércoles la tregua alcanzada la víspera disparando contra los autobuses que estaban preparados para iniciar el proceso de evacuación.
En un comunicado, el organismo militar ruso ha asegurado que los "radicales"han abierto fuego este miércoles de madrugada contra los autobuses que estaban preparados para iniciar la evacuación en el este de Alepo.
Según el Observatorio, las autoridades sirias impiden la aplicación del pacto forjado entre Rusia y Turquía para una evacuación por no haber sido consultadas, mientras que los opositores acusan a Irán, porque quiere incluir en el acuerdo algún punto referido a los pueblos de mayoría chií de Fua y Kefraya.
Dichas localidades están ubicadas en la vecina provincia de Idleb y están cercadas por el Frente de la Conquista del Levante (exfilial siria de Al Qaeda) y otros grupos.
El Observatorio agregó que otro de los motivos es que entre los rebeldes hay unos 250 guerrilleros extranjeros que las autoridades sirias quieren detener e investigar; y el hecho de que el ejército considere que no recibe nada a cambio en este pacto, ya que estaba a punto de tomar totalmente el área rebelde.
La ONG destacó que unas 15.000 personas iban a abandonar Alepo, de las que 5.000 eran insurgentes y 10.000 civiles, entre los que hay familiares de combatientes.
Ni Berri ni Yusef precisaron si entre las partes que negocian el desbloqueo del acuerdo se encuentran representantes del Gobierno de Damasco.
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