Israel construirá más colonias en Jerusalén Este

A pesar de la contundente condena de la ONU, edificará más de 600 asentamientos

A pesar de la votación en el Consejo de Seguridad de la ONU del viernes que exigió a Israel detener de inmediato toda construcción en los asentamientos, incluido en Jerusalén Este, el Ayuntamiento de Jerusalén da a entender que se están estudiando y elaborando diversos planes de nuevas construcciones en diferentes partes de la ciudad. Aunque no se lo dice explícitamente, ello incluye a Jerusalem oriental. «El Ayuntamiento no ha modificado su postura según la cual construir en Jerusalén es necesario para el desarrollo de la ciudad. Continuaremos desarrollando la capital de acuerdo a las necesidades por zonas y códigos de construcción, sin prejuicios, en beneficio de todos los residentes», respondieron oficialmente ante las preguntas de LA RAZÓN. Según el comunicado, «las decisiones de la comisión serán publicadas apenas hayan sido concluidas», en referencia al comité encargado de la aprobación de los planes de construcción en diferentes partes de la ciudad.

El rotativo «Israel Hayom», considerado prácticamente un portavoz del primer ministro, Benjamin Netanyahu, escribió que hoy se reúne el comité en cuestión para discutir la aprobación de nuevas construcciones en Jerusalén, entendiéndose que se trata de los barrios más allá de las «líneas del año 67». Meir Turjeman, vice-alcalde de Jerusalén, que encabeza la Comisión de Planificación de Construcción, declaró a dicho periódico que «ni la votación en la ONU ni ninguna otra entidad que intente imponernos qué hacer en Jerusalén, nos desvía de nuestro camino». Turjeman espera que «el Gobierno israelí y la nueva Administración norteamericana nos apoyen para que podamos compensar la falta de construcción durante los ocho años de Obama». Para los palestinos, toda construcción más allá de la llamada «línea verde», o sea en los territorios conquistados por Israel en la Guerra de los Seis Días de 1967, es «construcción de asentamientos en territorio ocupado». Pero para las autoridades israelíes hay una distinción clave: también quienes apoyan que se sigan construyendo asentamientos en las tierras hoy en disputa, usan una terminología totalmente distinta para ellos y para lo que se construye fuera de la «línea verde» en la zona de Jerusalén. Los barrios judíos erigidos en el límite municipal de Jerusalén, son para Israel parte integral de su capital. Por ende, un comunicado oficial del Ayuntamiento, aunque sí podrá especificar en qué barrios se aprueba determinada construcción, jamás hará referencia explícita a Jerusalén Oeste o Este, ya que para Israel, se trata de una capital, unificada.

Entre tanto, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás, espera que el fin de la construcción de los asentamientos se logre con la Conferencia en París que se reúne el 15 de enero. «Espero que aporte un mecanismo y cronograma para poner fin a la ocupación», declaró Abás, agregando que «la resolución demuestra que el mundo rechaza los asentamientos, porque son ilegales, están en nuestro territorio, incluido Jerusalén oriental».

Fuentes en Jerusalén comentaron a este diario que las medidas tomadas en cuanto al contacto con las embajadas en Israel de los países que votaron en favor de la resolución 2334 del Consejo de Seguridad, deben ser consideradas una «limitación temporal». No especificaron por cuánto tiempo pero sí aclararon que «tenemos que dejar sentada nuestra enérgica protesta por la votación, pero está claro que si un diplomático tiene un problema con el que hay que lidiar, tendrá con quién hablar».