Estados Unidos

Las cámaras, el tercer ojo

La Razón
La RazónLa Razón

- ¿Por qué hay lugares en Estados Unidos como Ferguson en los que hay sesgo racial dentro del Departamento de Justicia o de la Policía?

–El problema es muy complicado, pero seguimos viendo un patrón de comportamiento que se repite: la Policía usa fuerza letal contra un hombre negro desarmado. La Policía tiene derecho al uso de la fuerza en ciertas situaciones donde es razonable para defenderse, pero, como han mostrado esta serie de incidentes, los agentes a veces son mucho menos reacios a usarla dependiendo de quién tengan delante. Esto nos ha enseñado que no es un problema aislado en una comisaría, sino que debemos verlo como parte de un problema nacional. Y esto nos faltaba antes. Esta problemática no es nueva en absoluto, pero la opinión pública no veía el patrón, la conexión, y ahora ha quedado bastante claro.

- Un año después de la muerte del joven Michael Brown en Ferguson, ¿qué ha aprendido la Policía?

–Son mucho más conscientes del poder del vídeo en la sociedad. Muchos de ellos todavía no se habían enfrentado al verdadero poder de las imágenes de los civiles. Lo que hace el vídeo es redefinir la manera de contar la historia. Si en un caso hay vídeo, como el de Carolina del Sur, deja grabado hechos que no se pueden negar. Ese agente manifestó que su vida estaba en peligro y por eso le disparó. Sus superiores le creyeron y aceptaron sus informes a pesar de que los disparos fueran por la espalda. Sin embargo, cuando salió a la luz el vídeo, inmediatamente se acusó al policía de asesinato. Normalmente el agente tenía la última palabra, porque, o la otra persona o estaba muerta, o no había testigos, o al ser la víctima un posible detenido se creía al policía. Las cámaras de vídeo se han convertido en un tercer testigo objetivo. Esto es un gran cambio. Incluso ahora, hay policías que quieren llevar cámaras de vídeo corporales.

- Parece que este año ha sido el de mayor conflicto racial en Estados Unidos, pero no sé si es una impresión del todo cierta debido precisamente a las imágenes y a la globalización...

–Es fácil de tener esa impresión. Lo que es seguro es que no sabemos si hay más violencia policial este año o lo hubo el anterior. La Policía no lo ha registrado las muertes a manos de los agentes. Ahora son los medios los que están rellenando y guardando los datos para verlo como un todo. Como nación no hemos tenido la voluntad política para forzar a las autoridades locales a hacerlo y ver el cuadro completo del país. El Congreso lo ha intentado, pero no ha tenido el poder suficiente. Mi parecer es que no es que esté ocurriendo más ahora o en este último año. No es una epidemia repentina, sino que ha ocurrido durante años. Pero antes no se prestó la suficiente atención, no se contaba con las pruebas de los vídeos, el policía lo negaba o se creía que era un hecho aislado. Lo que ha cambiado ahora es que es obvio que es un problema nacional interconectado al que se tiene que hacer frente. No es peor desde el año pasado. Eso sí, ahora la población estadounidense tiene más conciencia y se cuestiona la actuación de la Policía y la autoridad policial mucho más que antes.

*Experto en en comportamiento policial y profesor de Derecho en la Univ. de Pittsburgh. Preguntas de Esther S. Sieteiglesias