Los 28 y Ban Ki Moon discuten cómo atajar las causas «en la raíz» de la inmigración

La Comisión Europea (CE) presentará mañana sus propuestas a los gobiernos de los Veintiocho para implementar la agenda europea de migración, que incluye el reasentamiento de miles de inmigrantes indocumentados llegados por el Mediterráneo a Italia y Grecia.

Los responsables de Desarrollo de los Veintiocho y el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, discutirán este martes durante una cena en Bruselas cómo atajar las causas "en la raíz"de la inmigración a través de la ayuda a la cooperación, según ha avanzado la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini.

"Siempre decimos que tenemos que resolver la cuestión afrontando el problema en la raíz, invirtiendo más en la lucha contra la pobreza

y en oportunidades económicas y sociales, sobre todo en Africa", ha explicado la jefa de la diplomacia europea en declaraciones a la prensa a su entrada.

"Hoy con los ministros de Desarrollo y con Ban Ki Moon tenemos una oportunidad perfecta de mirar cómo la Unión Europea y los países socios, especialmente en Africa, pueden promover más posibilidades para que los ciudadanos africanos tengan un presente y un futuro mejor, parcialmente resolviendo el problema en su raíz", ha apostillado la italiana.

Mogherini ha insistido en la cuestión "muy importante"del vínculo entre desarrollo e inmigración y ha confiado en "algunos compromisos europeos"en materia de financiación de la ayuda al desarrollo para que la posición de la UE sea "más fuerte"en las negociaciones internacionales sobre la nueva agenda de desarrollo sostenible posterior a 2015 cuando concluyan los Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU, el otro asunto que abordarán los Veintiocho con el secretario general de la ONU.

"Confío en que saldremos de la reunión con algunos compromisos, algunos compromisos europeos que pueden conseguir que nuestra posición sea más fuerte en el proceso de negociar, especialmente la financiación (...) en el marco de la ONU", ha avanzado Mogherini.

Mantener el 0,8 por ciento

Los Veintiocho discutirán si mantienen el compromiso de destinar el 0,7 por ciento del Producto Interior Bruto a la ayuda al desarrollo, según han avanzado fuentes europeas.

La UE y los estados miembro son el principal donante de ayuda al desarrollo y conjuntamente dan más de la mitad a nivel mundial y en 2014 aumentaron su ayuda hasta los 58.200 millones de euros, un 2,4 por ciento más que el año anterior, tras varios años de caída por la crisis económica. Entre 2014 y 2020, la ayuda al desarrollo de la UE se elevará a unos 82.000 millones de euros, según las cifras que manera la Comisión Europea.

La jefa de la diplomacia europea ha evitado precisar si en las discusiones con Ban Ki Moon, discutirán la operación militar naval de la UE acordada por los Veintiocho el pasado 18 de junio para combatir

a las mafias que trafican con inmigrantes en el Mediterráneo y que abre la puerta a destruir sus embarcaciones si el Consejo de Seguridad de la ONU o las autoridades libias lo autorizan después de que el secretario general del organismo internacional cuestionara una operación militar para atajar el fenómeno de la inmigración.

Cuotas de reparto de demandantes de asilo

Por otra parte, Mogherini ha confiado en que los Veintiocho lleguen al "consenso"necesario para aprobar por "mayoría cualificada"en junio la Agenda Europea para la Inmigración que incluye un sistema de cuotas para la relocalización de demandantes de asilo en situación de urgencia entre países, que presentará formalmente la Comisión Europea este miércoles y que ha sido muy criticado por la mayoría de países, entre ellos Francia y Reino Unido, que lo han rechazado de plano, pero también por España, que ha considerado injustos los criterios de reparto.

Mogherini ha dejado claro que la propuesta de la Comisión "no es perfecta"y "no es la solución a todo"pero representa "una revolución"respecto a la situación actual "porque introduce un elemento de solidaridad", que supone "claramente"una ventaja para los países más afectados por el auge de los flujos migratorios como Italia y Grecia.

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